Puente repudia a Trobajo y se centra en Valladolid
El ministro atiende la integración en la capital castellana y desoye las peticiones leonesas
La agenda del ministro de Transportes de Valladolid no tiene hueco para solventar la brecha ferroviaria de Trobajo del Camino; pero hoy se abre de par en par con la integración del ferrocarril en la capital castellana, que a ojo de los afectados en el cinturón urbano de León es un desaire del calibre de su predecesora en el cargo, cuando negaba el soterramiento en León y firmó un crédito de más de 700 millones de euros para bajar las vías en Montcada, provincia de Barcelona.
El tercer mes de ministro del ministerio de Transportes no ha aportado un ápice de empatía del Gobierno a las demandas vecinales de Trobajo, con el principio fundacional de meter los raíles por debajo de la ciudad.
Parte del envite de la plataforma por el soterramiento de Trobajo del Camino se dirige a estimular la implicación del ministro Puente, al que una vez al mes invoca a las puertas de la subdelegación del Gobierno, a donde llevan cada cuatro semanas una movilización, las pancartas y el grito por el derecho a la igualdad de trato y la atención del Gobierno con los problemas que les acometen a diario.
La trinchera de Trobajo frente al ministro socialista gana desde este viernes munición por el empeño de Puente de agraviar a León, por obra, palabra y omisión. «Lo del pensamiento, que cada cual crea lo que le parezca», ironizan en la plataforma vecinal de Trobajo que llevan más de tres años de firmeza contra la maquinaria de Adif.
Para recordar a Puente en la brecha que aglutina las batallas de León ante la negativa a soterrar las vías, se toma como base de inspiración el Juego de la Oca; en la última renovación del contenido de ripios y arengas que cuelgan del puente de Trobajo sale Puente, Puente, el ministro, en las sábanas del puente de Párroco Pablo Díez, sabana al fin en el límite de la selva del tren que enfrentan a diario los vecinos. Puente de Trobajo y Puente, Óscar, anillados por los rótulos en los que aflora el hartazgo de la localidad más poblada del cordón urbano de la capital leonesa. El puente que había que dinamitar hace tres años por mor de las hechuras de los trenes de alta velocidad, y que está a cuarenta días de ver pasar al primer AVE sin que revienten las costuras, es ahora soporte de valla publicitaria del desencanto con el Gobierno: de puente a Puente , con el que Trobajo se atreve a tutear al ministro de Valladolid en ese trance del desprecio, mientras el invocado regresa hoy a Valladolid a dar soluciones a la integración.
León dedicará los próximos pasos de su protesta a recordar que el ministro repudia un encuentro con esta tierra.