Defensa sustituirá los drones israelíes del Grosa por un modelo diseñado en España
El Searcher será relevado por el Sirtap, de Airbus Defense & Space y aportaciones de Colombia
El Searcher es el dron de grandes dimensiones que emplea el Grosa, la unidad de Inteligencia del Ejército de Tierra que opera desde León. Afianzada su estancia en Conde de Gazola tras la crisis surgida en julio de 2020 ante su posible traslado a Agoncillo, en La Rioja, el grupo se enfrentará en breve a un nuevo reto, la sustitución de este modelo, de origen israelí con el que lleva operando desde sus orígenes —incluso antes— por un nuevo dron diseñado en España, el Sirtap, según fuentes militares.
El Grosa surgió de las misiones en Afganistán que comenzaron empleando el Searcher y desde entonces este gran RPAS, siglas en inglés de sistema pilotado remotamente y término que se emplea en el argot militar, ha sido el núcleo de esta unidad dependiente del Regimiento de Inteligencia del Ejército de Tierra, con base en Valencia, por las posibilidades que ofrece a la hora de obtener información. Ahora, a punto de cumplir su vida útil, el Consejo de Ministros aprobó una partida de 595 millones de euros para renovar la flota de sus RPAS, tanto de las unidades del Ejército del Aire y del Espacio como las de Tierra, para adquirir el Sirtap, diseñado por Airbus Defense & Space en España y en colaboración con la Corporación de la Industria Aeronáutica Colombiana.
Para Aire y Tierra
El contrato del Ministerio de Defensa incluye la compra de nueve sistemas completos del Sirtap. Es decir, además del dron y su estación de control, además de dos simuladores con capacidad de instrucción y entrenamiento y el apoyo logístico inicial, como se concentró en el acuerdo del Consejo de Ministros de julio. «La adquisición de este sistema sustituirá a los sistemas de este tipo en servicio que están al final de su vida operativa, mejorando y potenciando las capacidades del Ejército de Tierra y del Ejército del Aire y del Espacio», cierra la referencia del acuerdo ministerial.
El Plan Director de RPAS del Ministerio de Defensa, elaborado en 2015, ya indicaba que el fin de la vida útil del Searcher arrancaría a partir de 2023 y que, por lo tanto, será a partir de este 2024 cuando sería preciso sustituir este modelo, tras quince años de servicio. El objetivo planteado por Tierra entonces era encontrar un modelo, también de Clase II —clasificación de los drones en función de su tamaño— por otro de altas prestaciones. De hecho, Sirtap es el acrónimo, ya en español, de Sistema Remotamente Tripulado de Altas Prestaciones.
Entre las características del Searcher, una envergadura de hasta diez metros y un peso que supera los 250 kilos. Su techo de vuelo de más de tres mil metros y su alcance va más allá de los 400 kilómetros. Las cámaras que llevan incorporadas permiten obtener y transmitir información tanto durante el día como por la noche, y que poseen infrarrojos. Son casi como aviones a pesar de que su piloto los controle desde tierra. El Sirtap tiene tres metros de longitud y mide doce metros de punta a punta de sus alas y cuenta con una altura de 2,2 metros. Es capaz de alcanzar los 6.400 metros de altitud y pesa 750 kilos, a los que se podrían añadir otros 150 como máximo de carga. A mayores, tiene 20 horas de autonomía y puede alcanzar los 200 kilómetros por hora en condiciones atmosféricas de entre -40 y 50 grados de temperatura.
En el caso del Ejército de Aire y del Espacio, las unidades del Sirtap que se destinen a sus filas convivirán con los Predator, los RPAS de General Atomics Aeronautical Systems, destinados también a inteligencia militar.