«Ser historiador del arte en Castilla y León es ser un ratón encima de un queso»

René Jesús Payo Hernanz: premio Castilla y León de Ciencias Sociales y Humanidades. Un reconocimiento que le llega joven y en plena forma intelectual, convencido de que el patrimonio artístico de Castilla y León es un espectacular filón sin fondo. Hoy recibe el premio con la satisfacción de que en esta categoría se reconozca la labor en torno al Patrimonio y de pasar a formar parte de una nómina de nombres históricos en las ciencias y humanidades.

—Educación, arte, patrimonio, arte contemporáneo, Castilla y León. Su nombre se asocia a muchos lugares del conocimiento y una larga trayectoria. ¿Lo resume en parte este premio?

—Son muchos años y muchas ilusiones. En torno a las dos cosas que más me gustan en esta vida: la enseñanza y la Historia del arte. Enseñar lo poco que sabes e investigar en torno al arte.

—El contexto del arte y el Patrimonio en Castilla y León es una suerte de oportunidades. ¿Le ayudó en su trayectoria?

—Cuando destinaron a Granada a Domínguez Ortiz y podía estudiar esos archivos, decía que se sentía como un ratón encima de un queso. Ser historiador en Castilla y León es ser un ratón sentado encima de un queso que nunca se acaba. Conocer ese patrimonio ingente e intentar investigarlo y aportar datos que sirvan. Y, por supuesto, trasladarlo a las aulas. Y a la sociedad. Hay que investigar para que las nuevas generaciones lo conozcan para que todo tenga sentido.

—Habría que hacer una lectura positiva en cuanto a que el patrimonio cultural de Castilla y León es valorado. No tenemos playa pero el turista se va maravillado. ¿Habría una edad de oro del patrimonio cultural?

—No tenemos playa ni falta que nos hace. Tenemos cultura del agua. Y grandes paisajes. Hay tierras agrestes, páramos, campiñas, bosques... Hay edades de oro en cada lugar. La Comunidad tiene muchos elementos comunes pero muchas especificidades. En León y Burgos, lógicamente, el Gótico. Qué vamos a decir también de León respecto al Románico, con ese edificio señero que es San Isidoro. El Renacimiento está muy vinculado a Valladolid, Medina del Campo, Medina de Rioseco. Ese Barroco de Valladolid o Salamanca, que es esa ciudad del Renacimiento y del Barroco, Nueva Atenas, como la llamaron desde la escuela de Salamanca. El Románico espectacular que se refleja en el Duero, en Zamora. Y el tránsito del siglo XIX al XX, que no se había visto tanto, con el Modernismo interesantísimo que hay en la propia Zamora, en León o Salamanca, con ese faro del Modernismo que es la Casa Lis. De Atapuerca al Musac, no hay un estilo que se nos resista en Castilla y León.

Dicho así, esta historia del arte y Castilla y León debería llevar como en las películas el cartel de continuará... ¿Habría alguna clave del futuro?

—Diseñar estrategias que nos permitan mantener ese legado. Me consta que se está haciendo.