Acudir al médico de cabecera sin pruebas complementarias, 74 €
No sólo la atención hospitalaria está tarifada. Acudir a la consulta del médico de Atención Primaria genera una ‘receta’ superior a 70 euros y situaciones apuradas como una rectoscopia le cuesta al erario público 61,69 euros. Los médicos y enfermeras de familia de León atendieron el año pasado 3,8 millones de consultas y casi 900.000 los del Bierzo, lo que supone una media diaria de 11.000. Las cifras por sí solas pueden no llamar la atención, pero si se tira de calculadora y se multiplican esos números por los 73,75 euros que cuesta una primera consulta médica sin pruebas complementarias (89,1, con ellas) o por los 66,57 euros de las sucesivas, la cosa cambia. Y eso sin contar los avisos a domicilio (63.000 en León y 30.000 en el Bierzo), que oscilan entre los 96,3 y los 103,4 euros, dependiendo de si se trata de una primera consulta y va acompañada de pruebas complementarias.
Esta relación de precios sirve para calcular la factura de aquellos enfermos obligados a pagar, bien a través de las aseguradoras, que cubren la asistencia en caso de accidentes de tráfico o deportivos, o de las mútuas, obligadas a sufragar los gastos por dolencias profesionales y accidentes laborales. También cuando otras comunidades derivan pacientes, ya que son los servicios de salud de origen quienes abonan los gastos. La horquilla de la tabla de precios abarca un sinfín de supuestos.