Por las vueltas que dio Bernardo
La glorieta de Oteruelo, una de sus últimas luchas, homenajeará al histórico pedáneo
La glorieta regula con mayor seguridad el antiguo cruce de Oteruelo de la Valdoncina marcado por los accidentes.
Podrían habérselo puesto al puente de paso entre las fincas del acceso a la ronda Sur que logró que incluyeran tras sentarse a la mismísima puerta del Ministerio de Fomento; o a la plazoleta del mirador; o a cualquiera de las decenas de calles del pueblo en las que, gracias a su intercesión, se arreglaron los servicios o se asfaltaron. Pero, al final, el Ayuntamiento de León ha decidido homenajear al antiguo pedáneo de Oteruelo de la Valdoncina, Bernardo Sánchez, fallecido en enero de 2021, con el bautizo a su nombre de la nueva glorieta que en la carretera de subida a La Virgen del Camino y Astorga, en el acceso al pueblo que forman el cruce de la avenida de Portugal con las calles Los Hojares y La Fanfalicia.
La glorieta Bernardo Sánchez da testimonio de la lucha incesante a lo largo de los años que mantuvo para acabar con la antigua regulación del cruce por medio de semáforos. Cada uno de los accidentes acumulados en ese punto negro le servía para volver a insistir al Ayuntamiento de León en la necesidad de que se promoviera la construcción de la glorieta que venía contemplada en el Plan General de Ordenación Urbana. Su estrategia para lograrla se basó en la puesta en práctica del bautizado por el concejal Vicente Canuria como «método Bernardo para pedáneos: ir un día a pedirlo y, si no hay resultado, volver al siguiente». Después de años y años de incansable reivindicación, la infraestructura terminó de ejecutarse en septiembre del pasado año. Pero el histórico pedáneo, que se mantuvo durante 22 años en el cargo, no llegó a verla ni siquiera en obras.
A partir de ahora, todos los que pasen por ahí podrán encontrar en el cartel el nombre de su responsable: «glorieta de Bernardo Sánchez».