Los vecinos del casco histórico de León estrenarán el turno de palabra ciudadana en el Pleno para censurar las terrazas

Los vecinos del casco histórico levantan de nuevo la voz, esta vez para que se les oiga en el Pleno del Ayuntamiento de la capital leonesa de este martes. La asociación León Típico estrenará el mecanismo abierto por el reglamento municipal de Participación Ciudadana para exponer ante la corporación sus reclamaciones a la ordenanza de terrazas que se someterá a aprobación inicial en la sesión plenaria. “Nos van a oír”, avisan.

Los representantes del colectivo insisten en que “hasta este viernes el Pleno del Ayuntamiento era un lugar cerrado en el que solo intervenían los concejales, los técnicos y miembros de las juntas vecinales de los pueblos agregados a León”. Pero, en esta ocasión, insisten en que van a aprovechar para expresar ante el gobierno de José Antonio Díez y los partidos de la oposición sus quejas por “el desprecio a los vecinos del casco histórico”. “No nos van a impedir explicar a la ciudadanía, y que conste en el acta del Pleno para la historia, nuestra postura y opinión de lo que está ocurriendo en nuestra ciudad”, conceden.

La palabra en el Pleno se le concederá a los vecinos del casco histórico después de que se acogieran al “artículo 15.2 del reglamento de Participación Ciudadana”. En este precepto, que no se ha empleado por ahora, se reseña que los asociaciones inscritas en el registro municipal “podrán exponer su parecer durante un máximo de diez minutos, con anterioridad al debate y votación de la propuesta incluida en el orden del día”.

Este punto hace que, una vez cursada la petición hace tres meses, ya hayan recibido la confirmación oficial de que podrán ejercer su derecho en el Pleno. Aunque en la comunicación, según inciden, se les avisa de que no podrán intervenir “10 minutos como marca la normativa”, sino tan sólo 5”.

La restricción se suma a las quejas que arrastra la asociación León Típico desde que solicitó en febrero formar parte del procedimiento de la ordenanza de terrazas. En este tiempo no se les ha “trasladado ni un solo documento, ni el borrador, ni los informes de los técnicos, ni las distintas negociaciones que han realizado con diversos sectores”. “Esto no es un capricho de esta asociación, sino un derecho que se basa en el principio de transparencia de la Administración Pública, recogido en el artículo 14 de la Constitución Española, que establece que "los ciudadanos tienen derecho a acceder a la información pública", detallan.

En la sesión plenaria, los portavoces de León Típico podrán exponer en primera persona sus quejas por una ordenanza que insisten en que no disminuirá el ruido en el casco histórico, que es Zona Acústicamente Saturada (ZAS). Para lograrlo, exigían que se limitara a un máximo de 12 el número de “veladores por establecimiento y condicionarlo a los niveles de ruido nocturno de la calle o plaza donde se encuentren, además de limitar también los horarios nocturnos, sobre todo en los días laborales”.

Entre las restricciones pedían que se incluyera “no conceder licencias de terrazas a los pubs, bares musicales, karaokes y discotecas, ya que es imposible que no generen ruido al abrir continuamente las puertas para atender las mesas de terrazas». Pero no les han hecho caso. Ahora tendrán que oírles al menos.