Villaquilambre mejorará 2.200 farolas con 2,6 M€ para ahorrar un 62% en luz
El plan de eficiencia energética se completa cinco años después y rebajará 200.000 € la factura
Villaquilambre rematará en los próximos meses su ambicioso plan de mejora de la eficiencia energética, que ha sufrido varios avatares desde que en 2015 se empezó a perfilar. El primer acuerdo con Somacyl contemplaba el recambio a led de las 4.000 luminarias con 2 M€, pero no llegó a cuajar y en 2019 este Ayuntamiento del área metropolitana leonesa optó por no esperar más y abordar con fondos propios y a través de ayudas del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (Idae) gran parte del plan.
En la primera fase se sustituyeron 1.800 luminarias de alumbrado público valoradas en 983.845 euros solicitando al Idae una subvención de casi la mitad del importe, 492.000 euros. Los cambios generaron un ahorro anual de unos 30.000 euros y 228 kilovatios, lo que significa una merma media de casi un 70%.
Ahora, el Ayuntamiento abordará la segunda fase para sustituir 2.207 puntos de luz por otras farolas de alto rendimiento y bajo consumo, además de implementar un sistema de telegestión punto a punto. El plan permitirá ahorrar un 61,79% de energía consumida, lo que supondrá un ahorro de 200.000 euros al año en la factura de la luz y el coste de mantenimiento.
El municipio dispone de un sistema de alumbrado público compuesto por 68 cuadros de mando y protección, de los cuales 26 ya habían sido renovados. Para los 42 cuadros restantes, se llevará a cabo una modernización que permitirá «cumplir con un triple objetivo, mejorar la calidad de la iluminación, aumentar la eficiencia energética y ahorrar cerca de 200.000 euros al año», precisó el alcalde, el socialista Jorge Pérez.
Unas obras que también se llevarán a cabo gracias a una nueva ayuda del Idae. Se trata de un préstamo reembolsable de más de 2,6 millones de euros concedidos al amparo del programa de ayudas para proyectos singulares de renovación de alumbrado exterior.
Las obras se planearon tras una auditoría energética que calificó de «ineficiente» el alumbrado y constató que se podía optimizar de un 60 a un 75%. El estudio determinó 535 áreas analizables (entre calles y plazas), que están controladas por 68 cuadros.