El plan de choque de Sanidad para el verano incluye refuerzo enfermero y cerrar 113 camas
Con las bolsas de médicos a cero se confía en adelantar los contratos a MIR
Lluvia de millones, refuerzo enfermero, peonadas voluntarias y retribuidas para mantener la actividad por las tardes en los centros de salud, transporte a la demanda en casos puntuales e incluso asistencia a domicilio componen el plan de contingencia para salvar la Sanidad este verano sin cerrar consultorios, aunque sí 113 camas en el Complejo Asistencial Universitario de León, todo un clásico cada estío al descender la demanda hospitalaria.
El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, fue el encargado de anunciar las líneas básicas del plan, que dedicará 11,5 millones a las sustituciones de personal sanitario y administrativo para Primaria en el conjunto de la comunidad y 17,6 millones para la atención hospitalaria.
El principal desembolso irá para la contratación de personal, con 455 profesionales de Enfermería para los centros de salud y unos 1.470 para los hospitales, que incluye a auxiliares, como celadores, técnicos de Rayos y administrativos para cubrir las vacaciones de los profesionales, aunque también hay dinero destinado para las reorganizaciones funcionales de los médicos de Familia. Las previsiones para León es sumar 48 enfermeras a los ambulatorios para cubrir 2.895 jornadas estivales (y 20 en el Bierzo), además de otras 40 en el Hospital y 24 en el de Ponferrada.
El desembolso es similar al de otros años, aunque en esta ocasión se está pendiente de poder contratar a los médicos MIR d cuarto año aunque acaban su formación en septiembre. La previsión de Sanidad es cerrar durante los meses de verano un total de 459 camas de los hospitales de la Comunidad por el parón estival, lo que supone el 7,2% del total. Una cifra que es ligeramente inferior al año pasado, cuando se prescindió de 470 camas. En todo caso, el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, dejó claro que son camas disponibles no utilizadas por la disminución de la demanda pero de las que se puede hacer uso cuando exista una necesidad o eventualidad y en cualquier momento. No en vano, subrayó que el plan de verano, al igual que otros años, busca garantizar la asistencia sanitaria, con la adopción de medidas.
En ese cierre de camas previstas por la Junta destaca el Hospital leonés, que es el más grande y también el que más camas va a clausurar, el 12,6%, dejando en funcionamiento 890. Burgos cierra 84, Salamanca 69, Palencia 59 y el Clínico de Valladolid 55, entre otros. En cambio, no se prescindirán de puestos en Miranda de Ebro y Aranda de Duero (Burgos) ni en Soria y solo dos en Zamora y tres en el Bierzo.
Tras lamentar que las bolsas de empleo en Medicina de Familia están agotadas, el consejero destacó que una de las formas de paliarlo es el mantenimiento de medidas extraordinarias como las peonadas en Atención Primaria, que seguirán siendo de carácter voluntario y remuneradas. Silvia Fernández aseguró que todos los centros de salud se mantendrán abiertos en verano al igual que los consultorios locales, con el plan de contingencia. En el caso de los consultorios, tendrán la misma frecuencia de asistencia de personal sanitario, conforme a la orden de frecuentación en vigor. Cuando, «puntualmente o de forma sobrevenida» no se pueda garantizar, existirá un sistema de transporte a la demanda, que será organizado y gratuito para el paciente, al igual que en los dos últimos años. De esta manera, se permitirá su traslado al punto establecido o se atenderá en el domicilio.
En los centros de salud urbanos, habrá medidas de organización funcional de la asistencia para garantizar que todos los pacientes sean atendidos en un plazo no inferior a 48 horas, que es el objetivo marcado por la Junta para 2024. Se incluyen las consultas de atención no demorable, consultas de atención compartida entre la enfermera y el médico y otras de actividad extraordinaria y se mantendrán las consultas de tarde.