La otra cara de la Policía Judicial
El neumático que abrió la resolución de un crimen
El esclarecimiento de muchos de los casos más mediáticos depende en buena medida del trabajo científico que se realiza desde este departamento; las pruebas suelen ser irrefutables y cuentan con certificados de acreditación que las validan en el juicio
El laboratorio trabaja con materiales de primera calidad.
Al redactor le piden que coja una botella con la mano y la suelte a continuación. Cazado. La huella que queda permite identificarlo y previa consulta en el Sistema Automático de Identificación Dactilar (Said) se sabe que no tiene antecedentes penales ni órdenes de búsqueda pendientes. De momento.
La tecnología permite a la Guardia Civil de León esclarecer casos como el crimen del dominicano, la muerte violenta de Paula en Mansilla de las Mulas o el caso más reciente de Reliegos. Se tarda más o menos tiempo, pero todos acaban cayendo.
«El sistema de detección dactilar data del siglo XVIII y aún no ha sido rebatido». Es necesario para que en los juicios haya prueba de cargo suficiente contra los acusados.
Policía Nacional, Guardia Civil, Mossos d’Esquadra y Policía Foral comparten una base de datos con siete millones de personas identificadas. Sólo hay que cruzar las huellas y el sistema ofrece «resultados irrefutables». La huella está donde está «pero lo que hay que justificar es cómo ha llegado ahí. Eso es lo que más intentan combatir los abogados en los juicios, la cadena de custodia». El Said es «la herramienta más potente de que disponemos».
El sistema es «rápido y eficaz» porque tiene múltiples ejemplos: «Los gemelos homocigóticos tienen en mismo ADN pero nunca las mismas huellas, es infalible». Así que en virtud de esa máxima se puede esclarecer más de un caso gracias a esas pistas. La mujer portuguesa atropellada mortalmente sin identificación fue datada gracias a esta técnica de investigación que de otro modo hubiese sido imposible de localizar de forma debida.
Jurídicamente es complicado añadir nuevos perfiles: «Los abogados aconsejan a sus clientes que no den consentimiento para que su material genético quede registrado».
MARAVILLOSO LUMINOL
Después está el maravilloso Luminol. Detecta sangre en superficies lavadas hasta dos y tres veces después de la limpieza. Se usa básicamente en ataques violentos y determina la dirección de las gotas de sangre. «Los restregones siempre aparecen y dejan su huella». El crimen de Mansilla, el de Reliegos o cualquier muerte violenta con pérdida de sangre son el foco más habitual de estos casos. Los candidatos a penados necesitan estar sometidos a una ratificación con pruebas sometidas a los controles Edac.
Los informes se elaboran y se ingresan los datos en las bases de los servicios de inteligencia de la seguridad pública. Se contrastan también con los datos de identificación con que cuenta el Estado y con ellos se permite tener controlado el asunto. «Si hay un suicidio en un tren, por ejemplo, nos mandan los datos de inmediato y casi en tiempo real podemos determinar la identidad de la persona.
CASOS CÉLEBRES
Sobre la mesa aparecen las fotos de las huellas del vehículo en el que se llevó hasta Villavente a Dawry Vilorio Almonte. Su identificación fue posible gracias a las huellas de las bandas de rodadura que quedaron en la zona donde apareció el cadáver. Capturado el conductor del vehículo, convencerle de que identificara a quienes le acompañaban fue sencillo. De otro lado aparecen las fotografías del taxista de La Ventas de Albares asesinado en su vehículo o el caso del crimen de Villaobispo, que se esclareció once años después gracias al cruce de datos por una serie de episodios delictivos en Salamanca.
Una anciana asesinada en El Burgo Ranero, ,gotas de sangre atomizadas, la huella de un robo con intimidación en una joyería, marcas de guantes para resolver atracos... el variopinto mundo de las investigaciones deja un sello inconfundible.
Huellas del vehículo usado en el crimen de Cembranos... hay de todo. Lo bueno sería que fuera cada vez a menos.