León acelera la construcción de la millonaria piscina de La Palomera

No hay más que una. El Ayuntamiento ha encontrado de rebote la manera de acelerar las obras de la millonaria intervención en la piscina cubierta de La Palomera. Cerrado el plazo de presentación de ofertas, el concurso público convocado por la administración se resolverá de manera directa al haberse presentado tan sólo la propuesta de una empresa. Sin más aspirantes, la mesa de contratación podrá adjudicar a lo largo de este mes el contrato, cifrado en 3.381.172,42 euros, de los que 2.536.152,43 euros se cubren con fondos de la Unión Europea (UE). El encargo, a falta de que se haga oficial que cumple con las condiciones, se apuntará a nombre de Prace Servicios y Obras.

La constructora, que ya ejecutó otros proyectos relevantes en la capital leonesa, como la última reurbanización de Ordoño II, en la que se gastaron 413.000 euros para cambiar el firme y pintarlo de colores, podrá comenzar a lo largo del verano la reforma de la piscina cubierta de La Palomera. El inicio podría acelerarse incluso para que las instalaciones estén en obras antes de septiembre, cuando estaba previsto, y que se puedan reabrir con arranque del curso escolar 2025-2026.

Esta fecha se marca como objetivo para poder recuperar la normalidad en el funcionamiento de las piscinas cubiertas municipales. El cierre hará que, hasta septiembre de 2025, el Ayuntamiento de León tenga que apañarse con las dos que quedarán operativas: Salvio Barrioluengo del Ejido y el Hispánico. Ahí deberán reubicarse los cerca de 600 usuarios al día que acceden en La Palomera para los cursos de aprendizaje, las actividades de los clubes de natación, la formación en salvamento y socorrismo, las asignaturas de la facultad de Inef y los que por su cuenta pagan la entrada para hacer deporte.

La necesidad de ajustarse a este calendario mete prisa para que la empresa adjudicataria ejecute el trabajo de rehabilitación de las piscinas cubiertas, inauguradas en el año 2002 sobre los terrenos del antiguo aparcamiento de los campos de fútbol de La Palomera. Los 3,38 millones de la factura, , IVA incluido, servirán para atacar «directamente las carencias energéticas» e intentar «actualizar su habitabilidad, accesibilidad, conservación, seguridad de utilización y digitalización del edificio con el fin de ampliar su vida útil y mejorar su confort en una situación de eficiencia y sostenibilidad aceptable», como reza la publicidad del contrato.

Los objetivos se encomendarán sobre todo a la nueva cubierta con forma de cresta que coronará el edificio. Sobre esta superficie se colocará la gran instalación de paneles fotovoltaicos que alimentará al complejo, junto con los nuevos sistemas de aerotermia de alta temperatura. Como resultado, de acuerdo al plan, se reducirá «el consumo de energía primaria no renovable un 78,94 %», además de que se mejorará la ventilación para rebajar las concentraciones de CO2 y luchar contra la propagación de virus.