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Con los mejores mimbres para aplicar el Plan Estratégico de I+i

La Junta movilizará 30 millones hasta 2017 para potenciar una red colaborativa de investigación sanitaria en la que León es clave para aportar tratamientos pioneros y seguros a los pacientes

Sonia Martín, directora general de Planificación, Investigación e Innovación de la Junta.

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p. infiesta
León

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Sanidad teje con buenos mimbres su Plan Estratégico de Investigación e Innovación 2023-2027 para una medicina personalizada, un marco que apuntala en León con el nuevo Instituto Ibioleón, creado el pasado 19 de abril, al constituir «un elemento fundamental para la investigación y una apuesta muy ambiciosa de la Junta para llegar a ser con esta entidad referente nacional e internacional en biosanidad una vez que haya conseguido la acreditación del Instituto Carlos III», explica la directora general de Planificación Sanitaria, Investigación e Innovación de la Consejería de Sanidad, Sonia Martín Pérez.

Ibioleón viene a sumarse como pilar clave de la estructura de investigación sanitaria de la Comunidad, que arrancó con el Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (Ibsal) en 2011, continuó con el Instituto de Investigación Biosanitaria de Valladolid a finales de 2023 (Ibiovall), prosiguió en primavera con el centro leonés y se rematará con una cuarta pata en Burgos.

Todos ellos trabajarán en red y se sitúan «a caballo entre Sanidad y las universidades», indica Martín, quien precisa que la idea es «formar una estructura de institutos robustos que puedan facilitar los trámites y servir de apoyo a todos los profesionales que quieran investigar e innovar».

En una palabra, están encaminados a «potenciar la política científica de la Comunidad y a concentrar las capacidades y recursos de los investigadores e instituciones para ser más colaborativos, competitivos y eficaces a la hora de abordar y conseguir proyectos, transferir el conocimiento e internacionalizarlo y registrar patentes».

Claro que cada instituto posee su propia seña de identidad, que en el caso de León pasa por la investigación de One Health cuyo enfoque es integral para equilibrar y optimizar la salud teniendo en cuenta la relación de los ecosistemas, los animales y las personas. Y esa seña se ha fijado por la importancia de los estudios universitarios de Veterinaria, Ciencias Ambientales y Biológicas en la provincia, además del importante ecosistema biofarmacológico que se asienta en León, con 10 de las 25 empresas más potentes del sector que figuran en la Comunidad (un 40%) y que «aupan a CyL a la tercera posición en España en compañías farmacéuticas sólo por detrás de Cataluña y Madrid», matiza Martín.

La directora de Planificación, Investigación e Innovación de la Junta asegura que «con la experiencia que tenemos, estimamos que en una década Ibioléon puede generar más de un centenar de puestos de trabajo dedicados a la gestión de investigaciones, ensayos clínicos y promover titulares de patentes». También señala que el instituto podrá llegar a movilizar unos 10 millones de euros anuales para proyectos nacionales e internacionales donde la colaboración público-privada es «esencial» y que un «centenar de grupos de investigación de la universidad, las gerencias de atención primaria de León y el Bierzo, los hospitales de ambas áreas y del servicio territorial de Sanidad han mostrado interés en adscribirse a Ibioléon, lo que demuestra el potencial de León y la importancia de generar red».

El centro desarrollará su trabajo científico en ocho áreas, «seis verticales que son Oncología y Hematología, Inmunología y Farmacología; Endocrinología, Nutrición, Enfermedades Hepáticas y Gastrointestinales; Patología de Grandes Sistemas; Neurociencias y Salud Mental; y Atención Primaria, Promoción de la Salud y Salud Comunitaria, que son complementadas por dos áreas transversales: Biotecnología, Biomateriales e IA y Medicina Personalizada y Terapias Avanzadas.

El Plan Estratégico tiene como finalidad «desarrollar un marco de actuación plurianual, participativo, transversal, accesible y alineado con el contexto estratégico actual», aclara. Además, cuenta con toda la población de Castilla y León, con independencia de su situación vital, su nivel de actividad o su dedicación profesional para alcanzar a toda la ciudadanía, a los diferentes profesionales sanitarios, a los centros e institutos de Investigación Sanitaria, a las universidades, a las empresas y a la propia Administración.

Se asienta sobre los tres pilares fundamentales que presenta cualquier macrosistema: estrategia, estructura y cultura que se traducen en tres ejes de acción. El primero es la extensión, de ahí la importancia de expandir la actividad de investigación e innovación en el Sistema de Salud de Castilla y León a todos los profesionales. El segundo, el posicionamiento, busca hacer de la Comunidad un referente nacional e internacional en investigación e innovación (I + i) de calidad, fomentando la colaboración y el establecimiento de alianzas. Y el tercero, la transferencia, permitirá trasladar los resultados que se obtengan con la actividad de investigación e innovación al ámbito clínico, promoviendo su aprovechamiento en el mundo empresarial también.

Fundamentalmente, con este plan se pretende «el impulso de un modelo económico basado en el conocimiento del sector sanitario, que proporcione oportunidades de desarrollo y crecimiento para, sobre todo, mejorar la salud y la calidad de vida de los ciudadanos». De ahí que para desarrollar las acciones oportunas, Martín insista en fortalecer las estructuras de apoyo a la I + i en Salud. En esta línea, se refiere a los Institutos de Investigación Sanitaria como pieza clave, ya que permitirán vertebrar las cuatro áreas geográficas de investigación e innovación.

Una red colaborativa que se extiende a las demás infraestructuras y capacidades del Sistema de Salud que también se dedican a innovar en los centros asistenciales. De esa forma, se espera «impulsar el establecimiento de alianzas externas que propicien el desarrollo de proyectos de investigación, estudios clínicos y patentes y modelos de utilidad de forma colaborativa y sistematizada con el tejido empresarial».

La directora general también hace hincapié en la importancia de reforzar la cultura de I + i mediante la divulgación de la actividad investigadora e innovadora y de sus resultados. Asimismo, ha destacado la necesidad de impulsar la ciencia para la ciudadanía incorporando a todos los agentes en las actividades de I + i que se desarrollan, con especial atención al impulso de la colaboración público-privada como motor de avance.

El objetivo del Gobierno autonómico es duplicar la masa crítica de investigadores en salud, pasando de 1.000 a 2.000. En el marco de estos institutos, la Junta movilizará en torno a 30 millones de euros en investigación sanitaria para potenciar la red colaborativa entre ellos y el resto de las estructuras investigadoras del sistema autonómico de salud, en conexión con universidades y otros centros de investigación.

Sonia Martín coincide en que CyL es una potencia en el sector biosanitario-biotecnológico al destacar en investigación e innovación farmacéutica, tecnología digital, genómica y terapias avanzadas. Esa fortaleza, a su juicio, reside tanto en el propio sistema de salud de la Comunidad, uno de los mejores de España, como en la presencia de un gran número de empresas punteras y con enorme potencial. Por ello, el Ejecutivo primará a las empresas del sector para que puedan invertir y desarrollar sus proyectos. Y, también, impulsará la colaboración público-privada con ese potente sector.

«Todo ello redundará en beneficio de los pacientes, que se beneficiarán mucho antes de tratamientos pioneros en fases experimentales seguras y habrá más ensayos clínicos para ellos, y también mejores guías de práctica clínica».

CyL puede presumir de ser una de las comunidades autónomas con mayor velocidad de implantación de la medicina de precisión, una revolución con múltiples retos y un cambio de paradigma entre la medicina clásica enfocada en la enfermedad y la de precisión, que busca afinar hasta diseñar un ‘traje a medida’ para tratar a cada paciente.

Y lo hace a partir de enormes cantidades de datos para curar y donde la inteligencia artificial también se hace hueco para poder procesar e interpretar tal amalgama de información que, debido a su complejidad y volumen, ya no se puede gestionar sólo de forma tradicional.

La medicina de precisión supone ya «una revolución en la asistencia» con mejoras «en la calidad de la atención, aumento de la seguridad, mayor precisión en los diagnósticos y mayores probabilidades de que las terapias sean más efectivas». A ello se añade la disminución de costes «y no a costa de la salud del paciente, sino a favor de su seguridad». Entre las iniciativas que ya están dando sus frutos en CyL, y que la Estrategia en Medicina Genómica, Personalizada y de Precisión para el SNS prioriza, resalta el abordaje y la secuenciación genómica de los pacientes con enfermedades raras. la Junta ya estrenó el Plan Integral Piercyl que establece una estructura asistencial modelo. Fue un paso de gigante, ya que los pacientes son «pioneros» en contar, dentro de la cartera de servicios, con la secuenciación masiva.

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LA INVESTIGACIÓN ALARGA LA VIDA DE 200 PACIENTES

La investigación está haciendo ganar ‘peso’ sanitario al Hospital de León, no sólo porque los ensayos y proyectos académicos se han triplicado en el último año desde los 243 efectuados en 2022 a los 401 registrados en 2023, sino porque han permitido alargar la vida a más de 200 pacientes. Según los datos del responsable de la Unidad de i+i y nuevo director de Ibioléon, Fernando Escalante, más del «50% de los que participaron en los ensayos relacionados con hematología mejoró y duplicó sus años de supervivencia».