León compra los contenedores marrón que debería haber implantado en enero
El Ayuntamiento tendrá que pagar 420.000 € más por no tener la nueva fracción de reciclaje
La subvención de la UE se concretó en noviembre de 2022, el contrato se sacó en septiembre de 2023 y, ahora, cuando ya se ha superado el plazo máximo para su implantación, que debía haberse estrenado en enero de este 2024, el Ayuntamiento de León se despacha con el anuncio de la adjudicación del suministro de los contenedores marrones. Los nuevos recipientes, en los que se deben tirar los desechos susceptibles de recuperarse para la elaboración de biogás, empezarán a recibirse para su distribución en las próximas semanas, cuando ya se cuenta con que el consistorio deberá afrontar una penalización cercana a los 420.000 euros por no haber cumplido en este ejercicio con la selección previa a la entrega en el Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) de San Román de la Vega.
La adjudicación del contrato a la empresa Formato Verde, SL por un importe de 1.062.985 euros garantiza la entrega de casi 2.000 recipientes, entre contenedores y cubos. Pero no evita que se incremente de 70 a 80 euros el precio por tonelada de desechos en el CTR, cuya factura para el Ayuntamiento de León pasará de 3 a 3,42 millones al final de este año. Sin la separación del contenedor marrón, se incrementará a razón de 10 euros por tonelada cada ejercicio, con un previsión de aumento de 478.100 euros para 2025.
La implantación empezará por los denominados grandes generadores de este tipo de residuos, como supermercados, hoteles, hostelería, industria y centros educativos y sanitarios. A partir de los resultados del estudio que el Ayuntamiento de León encargó a una empresa externa, con un presupuesto de 18.150 €, para que le dijera cómo hacerlo, se organizará la recogida de estos contenedores marrones como prueba para luego extenderlo al resto de la ciudadanía.
Los contenedores marrones, repartidos ya desde hace años por otras ciudades, contarán con un sistema de cierre con códigos para desbloquear su apertura y evitar que se depositen residuos impropios de esta fracción del reciclaje. En su interior deberán echarse las bolsas con los desechos de fruta, verdura, carne, pescado, pan y comida en general, así como el papel de cocina y los restos de café e infusiones, sin bolsa, pero no otros como pañales, polvo de barrer, ceniza y colillas, maderas, medicamentos o excrementos, que seguirán en la bolsa del contenedor general.
Sin detallar cuándo se implantará el contenedor marrón, el gobierno municipal de Diez se limitó a publicitar que el nuevo suministro hace que «León avance así hacía una recogida de residuos más sostenible y dentro del marco de las directivas europeas». La promoción la complementaron desde el consistorio con el apunte de que, en su trabajo para «la mejora y modernización del servicio de limpieza viaria para ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos y hacerlo de forma sostenible y eficiente», el Ayuntamiento incorporará «11 nuevos vehículos con una inversión total de 3,5 millones».
Dentro de esta flota se contarán ocho de ellos a través del sistema de renting : «dos barredoras viales, tres fregadoras/barredoras, un camión recolector de carga lateral y dos camiones recolectores de carga trasera». A las incorporaciones se sumará «un nuevo vehículo para la recogida de enseres y de dos aspiradores autopropulsados eléctricos».