Diario de León

Justicia

León dispone de un Servicio de Atención a Víctimas del Delito todavía infrautilizado

Presta apoyo de carácter jurídico y psicológico a las personas que necesitan ayuda por su condición de damnificadas

Editorial: Un servicio lamentablemente desconocido

Una víctima se dirige al interior del juzgado. JESÚS

León

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León y Ponferrada cuentan con sendas Oficinas de Atención a Víctimas del Delito que resultan casi desconocidas para el gran público y que prestan un servicio ejemplar para contribuir al restablecimiento de las condiciones adecuadas a las víctimas.

Las Oficinas de Asistencia a las Víctimas del Delito son un servicio multidisciplinar de atención a las necesidades de la víctima, de carácter público y gratuito, implantado por el Ministerio de Justicia. En la capital, las dependencias se encuentran ubicadas en los Juzgados de la Avenida de Sáez de Miera.

Atienden a toda persona física que haya sufrido un daño o perjuicio sobre su propia persona o patrimonio, en especial lesiones físicas o psíquicas, daños emocionales o perjuicios económicos directamente causados por la comisión de un delito. También se considera la existencia de víctimas indirectas, en los casos de muerte o desaparición de una persona que haya sido causada directamente por un delito, salvo que se trate de los responsables de los hechos.

Para realizar esta asistencia la Oficina de Asistencia a las Víctimas del Delito realizan planes de asistencia individualizados en las áreas jurídica, psicológica y social, con el fin último de minimizar la victimización primaria y evitar la secundaria. Se cordinan con todos los servicios competentes en atención a las víctimas.

El proceso empieza por una evaluación individualizada de la víctima en la que se atiende a las necesidades manifestadas por la misma, así como a su voluntad y se respeta plenamente su integridad física, mental y moral.

Así, la evaluación determina la forma de prevenir y evitar las consecuencias de la victimización primaria, la habitual y la secundaria, la intimidación y las represalias.

Tras el proceso de evaluación individualizada, se redacta un informe con el consentimiento previo e informado de la víctima, remitido con carácter reservado a la autoridad judicial o fiscal competente para adoptar las medidas de protección.

INFORME PREVIO

En el informe de evaluación individualizada, se proponen las medidas que se estimen pertinentes para la asistencia y protección de la víctima durante la fase de investigación, especialmente cuando se trata de víctimas especialmente vulnerables.Se desarrolla en cuatro fases: acogida-orientación, información, intervención y seguimiento.

La orientación supone informar desde una perspectiva muy global de las actuaciones que debe realizar la víctima, de los problemas a los que se puede enfrentar y de las posibles consecuencias. En la de información, la víctima tiene derecho, desde el primer contacto con las autoridades y personal funcionario, incluyendo el momento previo a la presentación de la denuncia, a recibir sin retrasos innecesarios información adaptada a sus circunstancias y condiciones personales y a la naturaleza del delito cometido y de los daños y perjuicios sufridos. En la de intervención se aportan detalles jurídicos y psicológicos. Finalmente en la de seguimiento se llevan a cabo los trámites convenientes para la finalización del procedimiento.

Las Oficinas de Asistencia a las Víctimas del Delito colaboran y se coordinarán con los diferentes órganos o entidades competentes que prestan asistencia a las víctimas que son judicatura, fiscalía, servicios psicosociales de la Administración de Justicia, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

Opciones

La actuación se lleva a cabo en cuatro fases, de acogida, información, intervención y seguimiento

Alternativas

Las víctimas son informadas de las posibilidades que se presentan en su caso
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