Protección Civil ‘cierra’ en San Andrés por el mal estado de su sede

Los voluntarios de la agrupación de Protección Civil de San Andrés del Rabanedo, «hartos» de reclamar soluciones para acabar con la «pésima» situación de las instalaciones que le cede el Ayuntamiento en la avenida de la Constitución, han optado por ‘cerrar’ su sede «por motivos de seguridad», remarcan.

«Cualquier día se nos caía el techo encima y no es cuestión», aclaran, tras mostrar agujeros en el techo del inmueble, desconchones y humedades en las paredes y el estado de abandono de la casa anexa «que sólo podemos usar para guardar parte de los vehículos porque el resto de la vivienda está en situación de ruina», valoran.

La veintena de voluntarios ha mantenido varias reuniones con el equipo de Gobierno municipal, pero aseguran que las promesas de mejora no acaban de llegar. «Ni nos dan otra ubicación ni reparan la actual», matizan. Por eso desde el pasado día 5 de agosto, estos efectivos que trabajan de forma altruista no acuden a las emergencias del municipio. Un mes en el que se han producido varios incendios de envergadura como el que arrasó más de una hectárea junto al Centro de Referencia Estatal (CRE). Precisamente, la mayoría de las salidas habituales de Protección Civil son para apagar fuegos dentro y fuera del término municipal.

Tampoco han participado en la últimas semanas en los Dispositivos de Riesgo Previsible para garantizar la seguridad en eventos culturales, deportivos y de ocio, como las fiestas de Villabalter, ni en la prevención y control de riesgos en el Camino de Santiago. Esta agrupación lleva funcionando en San Andrés desde que en 2015 los anteriores voluntarios se dieron de baja en solidaridad con su jefe, cesado tras veinte años de servicio. En esos primeros meses realizaron 204 intervenciones, entre ellas 59 incendios, tres rescates, 35 actuaciones de seguridad en la vía pública y otras 30 de ayuda a la ciudadanía. Su labor siempre ha beneficiado a los vecinos.