Los cerca de 600 usuarios diarios aguardan la fecha de su traslado

El primer horizonte esbozado por los responsables municipales emplazaba el cierre de las instalaciones ya durante este mes de septiembre para poder comenzar con las obras. Un año más tarde, justo antes del siguiente curso escolar, se fiaba la reapertura, tras doce meses en los que los 600 usuarios de media que tienen las piscinas cubiertas de La Palomera tendrían que reubicarse en las otras dos instalaciones habilitadas: el Hispánico y Salvio Barrioluengo del Ejido.

Ahora, este calendario queda en entredicho. En espera de que se adjudique el proyecto y se formalice el contrato, todavía no hay una fecha exacta para el cierre de las instalaciones municipales, aunque no se aventura para antes de final del mes de octubre. A partir de ese momento empezará a correr el calendario, en el que se espera recortar los 10 meses de obras en el interior que se marcan como máximo en los pliegos y los cuatro meses para rematar el exterior, donde se colocará una «cresta» en la que se colocarán los paneles fotovoltaicos.