El déficit de fisioterapeutas forma un tapón de 2.225 enfermos en los centros de salud de León

No son un puñado, sino 2.225 las personas que esperan iniciar su rehabilitación de espalda, rodilla, cadera, manos... en los centros de salud del área de León. Un tapón que va en aumento porque los ejercicios terapéuticos, masajes, corrientes y estiramientos que efectúan los fisioterapeutas han demostrado su eficacia y un cierto alivio para una población cada vez más envejecida, que no sólo necesita librarse del dolor de las articulaciones y músculos, sino prevenir lesiones.

Hace tres años la lista de espera estaba integrada por 1.400 personas, un millar menos que actualmente a pesar del refuerzo que se hizo en esa fecha al sumar ocho profesionales a la plantilla estancada durante años de 17 fisioterapeutas. Las cifras son tozudas y demuestran que es uno de los servicios más demandados, ya que en el último mes se han registrado 1.078 volantes nuevos.

Estos pacientes deben armarse de paciencia, ya que las esperas para iniciar las sesiones de fisioterapia pueden demorarse hasta cinco meses, según el centro al que estén adscritos. Curiosamente, el centro de salud de Eras de Renueva, el de mayor población asignada (37.125) y el de La Condesa (20.880) carecen de servicio de fisioterapia y sus usuarios se derivan al de La Palomera, donde la lista de espera se nutre con más de 800 personas que deben aguardan de media hasta 84 días (casi tres meses).

El centro de salud con más demora para acceder a un fisio es el de Cistierna, que arrastra casi cinco meses de espera, seguido del de Armunia, con cuatro meses, y Trobajo del Camino, con 114 días (3,8 meses).

En el otro extremo de la balanzas emerge La Cabrera con sólo seis pacientes nuevos y cero días de espera. También en La Magdalena se contabilizan sólo catorce usuarios nuevos, con ocho en espera de 18 días para una población asignada por encima de las 2.000 personas, mientras en Santa María del Páramo se aguardan diez días y ha incorporado a 32 pacientes nuevos.

El último centro de salud en abrirse, El Ejido, que funciona desde hace un año, acumula ya mes y medio de demora en atender a los usuarios de fisioterapia, con una lista de espera de 117 personas y 68 nuevos. Su gemelo, que se quedó en José Aguado, posee una lista de espera similar con 119 afectados, pero la espera media es de 49 días.

El sindicato de Enfermería Satse advierte «que el importante déficit de fisioterapeutas que sufre la sanidad pública provoca esperas de semanas y meses, posibles empeoramientos de los problemas de salud y elevados costes económicos». Por eso reivindica un número adecuado de fisioterapeutas en todos los servicios de salud. Opina que es «un grave problema ante el que las distintas administraciones sanitarias no están destinando los medios y recursos necesarios». Indica que, cuanto más se tarda en atender a una persona, más crónico puede llegar a ser su problema y más tratamientos y cuidados serán necesarios para facilitar su reinserción social plena. El sindicato reclama que la consejería de Sanidad aumenten las plantillas de fisioterapeutas en los hospitales y, especialmente, en los centros de salud, ya que en muchos de ellos no hay fisioterapeutas o solo uno para atender a miles de personas.

Otra consecuencia es que las personas «no ven otra opción que recurrir a la sanidad privada, con un elevado gasto económico que oscila entre 400 y 600 euros un tratamiento de 10 sesiones. Cifras que suelen incrementarse porque, en muchas ocasiones, se requieren más sesiones de las que se programan inicialmente. También demanda una reclasificación profesional, ya que están incluidos en el subgrupo A2.