Una feria para que León vuele
El encuentro de Productos de León ha superado las expectativas con más de 45.000 visitantes, que han obligado a los productores a reponer constantemente sus viandas
Ventas, contactos y promoción, se aúnan en la feria con más sabor
Editorial: Los productos del compromiso con León.
Sólo había que seguir el rastro de la gente para llegar a la Feria Productos de León en el Palacio de Exposiciones o hacer el camino inverso de aquellos que durante todo el fin de semana volvían de él cargados de bolsas. En algunos momentos incluso ha habido colas para poder entrar, como este domingo a media mañana o el sábado por la tarde, cuando durante hora y media hubo aforo completo y los que querían entrar tenía que esperar al menos media hora. Todo ello pone de manifiesto que la Feria de Productos de León este año, con un centenar de participantes, ha sido un éxito y superado el número de visitantes previsto, al alcanzar las 45.000 entradas, cinco mil más que en 2023.
Pero más allá, las ventas. Más de 300 kilos de queso, en un único puesto durante cuatro días o el hecho de que las patatas fritas previstas para una jornada completa se acabasen antes de mediodía, por lo que hubo que correr para preparar más y tener género para por la tarde.
«A la gente cada vez más le gustan los productos naturales, los ecológicos, los artesanos... y aprovechan para venir a la feria, porque llega gente de otras provincias y también del extranjero», precisa Carmen Pérez, de Quesos Gabino Pérez, quien señaló que por la feria de este año ha pasado más gente que en otras ediciones.
«Durante cuatro días, este Palacio de Exposiciones se ha convertido en la catedral de lo mejor de nuestra tierra. Y no hablo sólo de los Productos de León, sino, sobre todo, de nuestras gentes», dijo el presidente de la Diputación, Gerardo Álvarez Courel, en el cierre del encuentro, para incidió en el lema de esta año, Sabor con Amor, y animar al consumo de los productos de la tierra y sobre todo, «ahora que se acercan las navidades; porque así seguiremos haciendo provincia, seguiremos haciendo medio rural y seguiremos haciendo León».
«Durante cuatro días, este Palacio de Exposiciones se ha convertido en la catedral de lo mejor de la tierra»
El presidente de la Diputación intervino, junto con el vicepresidente de la institución provincial y delegado del área de Productos de León, Roberto Aller, en la clausura de la feria de este año, que dio paso a la entrega de premios. Aller dijo sentirse «orgulloso» por el «esfuerzo» y la «ilusión» que ponen los productores para «colocar a León en lo más alto del ránking de calidad agroalimentaria en España. Y también fuera de nuestras fronteras».
Tanto Courel como Aller apuntaron que desde hoy mismo se comenzará a trabajar en la edición del próximo año y el vicepresidente añadió: «Las ventas han sido mucho más que las esperadas. Nuestro nuevo punto de vista, desde la colocación de los stands hasta la nueva organización de los recursos con los que contamos, han sido óptimos. Recuperar la fecha tradicional en la que se celebra la feria, también».
La nueva organización de los stands, colocados en grupos de cuatro también gustó mucho a los productores «porque así todos tenemos una esquina», como indicó Mario Martínez, de Caramelos Santos. Además de vender, la feria también es un plus para establecer «contactos» y «abrir puertas comerciales a otros mercados, venta cruzada», señaló Fernando González Moratiel, de El Quesín.
El joven Daniel Álvarez Marcos, de la saga de las famosas patatas, explicaba a los clientes que ya no les quedaban patatas «normales» porque habían volado durante la mañana y que hasta que friesen una nueva remesa sólo tenían de ajo y picantes. Desde el stand de La Mejor Alubia, Jorge Pérez, comentó durante el último día de la feria que este año tuvo «muchas ventas» y que la Feria de Productos de León «funciona muy bien, porque es un trato directo entre los productores y los clientes, preguntan, prueban y vuelven el próximo año».
Y sí, las pequeñas degustaciones que los productores ponen en los stands para que los visitantes caten sus productos, literalmente, vuelan. Algunos nos da abasto a reponer mientras a su alrededor las manos se intentan hacer un hueco para llegar a los platillos.
Los Helazos han sido una de las estrellas de la feria. Con uno de los premios por su helado de Albarín, César Lazo no ha parado de llenar cucuruchos. «Esto es muy gratificante, porque tienes un trato muy directo con el cliente», señaló su compañera Bego Garduño, quien añadió que estos cuatro días han sido «un trampolín» para sus helados
Las Galletas de Hierro La Peregrina son fieles a la feria, que es «un buen escaparate para dar a conocer los productos», como explicó Poli Santos Herrero y fieles también son al evento las hermanas jerónimas de Toral de los Guzmanes, que invierten lo recaudado con la venta de sus dulces en arreglar el tejado «y los gastos de la casa», dijo la madre Beatriz. En Fungi Set, Vera Stoyanova, vende setas y estos cuatro días le sorprendió «que la gente conozca el producto, se vende bastante a gente de León, pero también a la que viene de fuera».
Llegar de un puesto a otro no fue fácil en algunos momentos. El pequeño Derek y su intención de participar en el taller de queso consiguió que sus padres acudieran por primera vez a la feria y los granadinos Ismael y Natalia, que ahora viven en León, valoraron el hecho de que hubiese actividades para niños dentro de este evento, del que el año pasado ya llevaron cecina de chivo a su casa del sur. «Gustó mucho, a mí me encanta», señaló Natalia,
Miel, embutidos, vinos, pan... todo fue posible durante cuatro días. «Pruebas, ves las empresas y conoces lo que hacen, que a mí me ha sorprendido ver a algunas que ni siquiera sabía que eran de León», señalaron Juan Carlos y Beatriz con sus bolsas llenas bajo el brazo.