Escalofriantes whatsapps entre Vallejo Balda y Chaouqui sobre Emanuela Orlandi
La Fiscalía italiana tiene en sus manos el cruce de mensajes entre el execónomo de la Diócesis de Astorga y la relaciones públicas italiana en el que intercambian información sobre la desaparición de la niña Emanuela Orlandi en 1983. El misterio es cómo accedieron y por qué a información confidencial del Vaticano sobre un caso inicialmente lejano a ellos
El Vaticano está en posesión de algunas capturas de pantalla de mensajes entre el sacerdote leonés Lucio Ángel Vallejo Balda y la relaciones públicas del Vaticano Inmaculada Chaouqui desde hace meses, en un tiempo en el que mantuvieron una intensa relación. La información que maneja se refiere al caso de la desaparición en 1983 de Emanuela Orlandi en suelo vaticano. Se supone que nadie sabía nada de esta tenebrosa historia, pero conversaciones que han salido ahora a la luz ensombrecen más aún el panorama. Una de las frases capturadas deja de piedra. Esos intercambios se remontan a 2014: "Tenemos que pagar a los ladrones/profanadores de tumbas, hay que hablar de ello con el Papa".
Lucio Ángel Vallejo Balda fue el sacerdote incardinado en Astorga elegido en 2014 para llevar la caja fuerte del Vaticano, asunto que después acabó con un siniestro final. Hoy vuelve a ser actor principal en una espinosa trama de corrupción y misterio en el Vaticano. El complicado caso de Emanuela Orlandi, la joven italiana desaparecida cuando regresaba a su casa tras unas clases de música en 1983, vuelve a encender los focos esta vez con novedades inquietantes. Nuevos chats filtrados que ya están en manos de la Fiscalía podrían arrojar luz sobre el oscuro caso que ha mantenido en vilo al Vaticano y al mundo entero durante más de tres décadas.
Y en esa espiral de conspiraciones vuelve a aparecer la participación del sacerdote Lucio Ángel Vallejo Balda, que pasó de proteger las finanzas de la Diócesis de Astorga a las de la Santa Sede en un salto meteórico que el Opus Dei valoró con enorme gratitud entre los muros pontificios.
Ahora, según un determinado grupo de chats de WhatsApp, que fueron entregados a la Comisión bicameral de investigación sobre la desaparición de Emanuela Orlanti y también de Mirella Gregori, se puede leer: «En septiembre hay que hacer desaparecer lo de Orlandi y pagar a los profanadores de tumbas. Hay que hablar de esto con el papa».
Estos mensajes encienden las alarmas y añaden una capa de misterio al caso de Emanuela Orlandi. La conversación de hace 10 años podría añadir un nuevo capítulo al oscuro misterio que ha englobado la desaparición de la joven. Vallejo Balda nunca pudo participar en nada oscurso relativo a la desaparición de la joven puesto que él llegó a Roma mucho después del suceso, pero estos mensajes revelados por los medios italianos sí podrían probar el conocimiento del entonces monseñor Luicio Ángel Vallejo Balda -nunca fue obispo pero su cargo le otorgaba este privilegio- sobre asuntos relativos al caso Orlandi que se sigue investigando en el Vaticano con el inquebratable trabajo de la familia de la joven.
Los whatsapp que se escribieron los ex miembros de la Cosea Francesca Immacolata Chaouqui y monseñor Lucio Vallejo Balda en mensajes ya están en manos de la Comisión bicameral de investigación sobre la desaparición de Emanuela y Mirella Gregori, según una información del diario Domani. Es el periódico de Emiliano Fittipaldi, uno de los periodistas encausados en el Vatileaks 2 por difundir secretos filtrados por Chaouqui y Vallejo Balda, y por los que ambos fueron condenados y posteriormente dispensados por el papa. El periodista escribió libros y hoy es el referente en este caso.
Volviendo a las conversaciones entre Chaouqui y Vallejo Balda que ahora han salido a la luz, la relaciones públicas habría escrito en un momento de sus intercambios: "El contenido y las circunstancias de los mensajes entregados por Pietro a la comisión no serán objeto de ningún comentario por mi parte porque forman parte de asuntos sobre los que estoy obligado al Secreto de Estado". Estas palabras resumen la esencia de la complejidad de este caso, que parece moverse entre las paredes del Vaticano y trasciende lo puramente judicial.
Pietro Orlandi, hermano incansable de Emanuela Orlandi, confirma que "en parte" el contenido de los mensajes que entregó corresponde al publicado por el diario Domani. "Las páginas entregadas", explica, “son ocho, aunque obviamente no todas hablan de Emanuela”. "Yo siempre he hecho un llamamiento al papa Francisco para que retirara el secreto pontificio a Francesca Immaculada Chouqui", sentenció en declaraciones recogidas por los medios italianos.
En otras revelaciones, Chaouqui dice: «Vi a Giani (el antiguo jefe de la gendarmería que, según el propio Orlandi, sabría la verdad sobre la desaparición de su hermana) No creo que sea como decís de él. Lo que hicieron es un crimen y él debe saberlo. Quema esta conversación en cuanto la leas. Haz copias al menos de lo de Orlandi y las enviaré a la fiscalía de forma anónima. Estas cosas acaban mal». «No le digas nada a Ciani. Lo de Orlandi es un asunto serio. El Cardenal dijo que debemos poner toda nuestra fuerza en esto, el Papa está con nosotros. Se preocupa mucho por esto y lo haremos bien», responde Vallejo Balda, según esta publicación. Pero esta conversación está en cuarentena puesto que se presupone que el teléfono grabado como Balda fuera el suyo. No obstante, la fiscalía no parece tener objeciones.
Es ella de nuevo quien, según revela Corriere della Sera, en el transcurso de las conversaciones prevé escenarios y estrategias basadas en las intenciones del papa Francisco para esclarecer todo el asunto: "Lanzar todo por los aires y destruir el Vaticano no tiene sentido (...) El Papa se equivoca al manejar esto sin la gendarmería (...) ¿Cómo vamos a pagar a estos georradares de tumbas? El Papa quiere saberlo pero ¿después qué? ¿Quién paga? Y sobre todo, ¿quién paga en secreto? (...) Puede que tengamos dinero de la fundación, pero lanzarse ahora a esta aventura con periodistas es pura locura".
Estos mensajes, facilitados por Orlandi en fotocopias, habrían sido extraídos de dos teléfonos confidenciales en uso por Chaouqui y Balda. Los medios siguen en curso las comprobaciones sobre su origen y contenido.