San Andrés ve limitado su crédito extra de 13 a 6,5 M€
Las inversiones serán de 147.000 € para un etilómetro, calderas y señales
El Gobierno de San Andrés del Rabanedo se ha visto obligado a realizar un encaje de bolillos económico tras el revés que ha supuesto el cambio de las normas fiscales dictadas por el Ministerio de Hacienda. De modo que el crédito extraordinario de 13 millones que aspiraban a aprobar para realizar cuantiosas inversiones en el municipio se ha visto mermado más de la mitad, hasta 6,5 millones y con sólo un 2,3% de ese montante para mejoras.
Así que los 147.376 euros consignados servirán para adquirir un nuevo etilómetro (12.100 euros) que la alcaldesa, Ana Fernández Caurel, considera indispensable porque el actual que usa la Policía Local «está machacado y por seguridad vial es muy importante». En la lista se incluye más señalización horizontal y vertical (14.863 €), parte de las áreas de juegos infantiles del año pasado (60.052) y la cubierta del consultorio de San Andrés (31.460), «que tiene goteras y no se va a dejar a los vecinos que vayan al médico con paragüas», precisa la regidora para destacar que estas inversiones «son urgemtes y de necesidad, casi de subsistencia».
En el mismo sentido, se prevén dedicar 1.500 euros al equipamiento de la cocina de infantil, o las calderas del colegio Trepalio (4.100 €) y de la casa de cultura de Trobajo (6.462 €), que «ambas están a punto de cumplir su vida útil». En el documento figura, además, la asistencia técnica para la reforma integral del pabellón Antonio Valbuena (16.819 euros), «imprescindible para conocer la valoración de la obra y pedir subvenciones para acometerla o realizarla con fondos propios», señala Fernández Caurel.
La concejala de Hacienda, Personal y Régimen Interior. María Ángeles González, justifica la limitación de los 13 millones iniciales que iba a tener el crédito extraordinario a los 6,5 actuales en que «por culpa de los cambios de secretario y tesorero se retrasó nuestra liquidación de contabilidad, y hasta ese momento no pudimos conocer el remanente, que arrojó un superávit de 13 millones que pensábamos utilizar en su integridad. Pero vino Hacienda y nos cercenó las intenciones al publicar un nuevo techo de gasto, que nos afecta porque estamos sujetos a un plan de ajuste».
También recuerda que el año pasado se realizó una petición al ministerio para poder invertir más y autorizó a San Andrés 1 millón de euros, «pero al no aprobarse la ordenanza reguladora de la tasa de basuras (tras la desaparición de Gersul), tuvimos que destinar esa cuantía a sufragar esos recibos y sólo nos quedamos con 100.000 euros».
Por otro lado, la alcaldesa confía en que la oposición permita aprobar el crédito, que se dio a conocer a los grupos el pasado 19 de septiembre, aunque admite que no consensuó las inversiones de 147.000 euros «porque son mejoras básicas e imprescindibles» para el funcionamiento de los servicios municipales.