Fallece Rosa Castro, referente del sindicalismo y el feminismo en León

Rosa siempre tenía el dato, la frase y el contexto. Y la valentía de contarlo. Rosa Castro Fonseca, referente del sindicalismo y del feminismo en León, se nos ha ido muy pronto. Este 30 de octubre, a los 69 años de edad, su corazón se apagó después de una vida a la que se entregó con pasión. Trabajadora social de profesión, militante de Comisiones Obreras de corazón y de raíces en la cuenca minera asturiana y el Páramo leonés, formó parte de la ejecutiva de CC.OO en León entre 2004 y 2023. 

En este espacio estuvo vinculada a las áreas de Igualdad y Migraciones y con anterioridad tuvo una intensa actividad como delegada del comité de empresa de la Junta de Castilla y León, donde trabajó en el área de Protección a la Infancia desde que la Junta de Castilla y León asumió las competencias.

Nacida en Mansilla del Páramo en una familia de tres hermanas, con Marisa y Carmina, es definida por sus compañeros de Comisiones Obreras como una mujer "guerrera, en el mejor sentido de la palabra, ponía pasión en todo lo que hacía y rápidamente se remangaba si era necesario para defender los derechos de las mujeres y de los más desfavorecidos".

Hasta sus últimos días de vida ha mantenido el compromiso con la lucha contra la violencia machista, con su presencia en las concentraciones de los Lunes sin Sol. Cada 8 de marzo o 25 de noviembre era el rostro del sindicato para denunciar la precariedad, la violencia y las brechas salariales y sociales que sufren las mujeres o situaciones como la larga temporada de seis meses en que estuvo sin cubrir la Unidad de Violencia de Género de la Subdelegación del Gobierno en León, en la etapa de Rajoy. 

En las épocas de mayor afluencia de personas migrantes en León, a principios de este siglo, denunció públicamente las mafias a las que se veían sometidos los marroquíes y sus dificultades para encontrar trabajo e incluso vivienda, como atestigua la hemeroteca de Diario de León.

"Cuando llegabas al sindicato ella siempre te recibía y acogía con cariño, eras una más a trabajar por cambiar todas las injusticias", señala el obituario que le dedica Comisiones Obreras. Sus compañeros y compañeras dejan constancia de su tesón en la lucha feminista: "Como secretaria de mujer siempre tendió puentes para unir las reivindicaciones feministas del sindicato con las organizaciones de mujeres en León", cosa que no siempre es fácil en un terreno tan masculinizado como son los sindicatos.

Rosa Castro, casada con Eutimio Sarmiento González, deja también a dos hijos, Álvaro y Aída y su hijo político, Miguel García. Encaró su enfermedad con el mismo arrojo que todos sus compromisos en la vida. Pero el cáncer no le dio tregua.

La capilla ardiente se encuentra en el Tanatorio de Santa María del Páramo y el velatorio permanecerá abierto a lo largo de este miércoles. El jueves su cuerpo será incinerado en la intimidad familiar. Que la tierra te sea leve.