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San Andrés aprueba el crédito extra con el ‘no voto’ del grueso de la oposición

El argumento de la subida salarial a los empleados públicos salva la propuesta de la alcaldesa
Editorial: 'Esperpento en San Andrés'

San Andrés del Rabanedo vivió ayer otro maratoniano pleno municipal. DL

León

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El crédito extraordinario con cargo a parte de los remanentes municipales del año pasado en San Andrés del Rabanedo salió adelante ayer tras horas de debate con la peculiar forma del «no voto» del grueso de la oposición municipal. Sólo los seis concejales de UPL en el gobierno votaron a favor, el concejal de Ciudadanos y la no adscrita votaron en contra, y a la abstención de los 3 de Vox se asumieron finalmente los diez de PP, PSOE e IU. Estos tres partidos pusieron en un brete al secretario municipal, al justificar una postura de ‘no voto’ que ni se sumaba a la formula de a favor o en contra, ni a la de la abstención. Tras un receso ante una situación insólita, el secretario determinó que todos ellos eran en la práctica abstenciones, y así quedaron registradas, y aprobado el crédito extraordinario.

La cuestión de fondo no era el desacuerdo sobre la gestión (o falta de gestión, según coincidieron los partidos de la oposición) municipal por parte de la alcaldesa leonesista, sino que en el paquete del crédito extraordinario se liquidaban las actualizaciones salariales a los empleados públicos 625.000 €) y las indemnizaciones por sentencias (180.000 €). En total, una partida de 805.000 €. Y ahí ningún partido quiso pillarse los dedos.

«Al no haber emitido voto en sentido favorable ni en contra, se entiende que el voto de PP, PSOE e IU entra en la actitud omisiva que equivaldría a una abstención», sentenció finalmente el secretario municipal.

Todo para rematar un largo (como es habitual) y tenso debate que en el caso del crédito extraordinario de 6,531 millones de euros con cargo al remanente de más de 13 millones del año pasado se saldó con el reproche generalizado al equipo de gobierno por ausencia de diálogo, imposiciones pasadas por el interventor hoy ya ausente sin capacidad de modificación, críticas a la falta de gestión y gobierno de la UPL e indignación ante una situación de deriva municipal que parece condenar el futuro del tercer ayuntamiento de la provincia.

Críticas repetidas a las que la alcaldesa, Ana Fernández Caurel, respondió incansable que el documento con las cantidades y líneas de gasto del crédito extraordinario se habían enviado a todos los partidos el 19 de septiembre, y que no ha recibido respuesta, por lo que las entiende asumidas.

El crédito extraordinario se justifica por los gastos que necesariamente han de afrontarse, aunque está limitado por las reglas de estabilidad presupuestaria (que se habían suspendido entre 2020 y 2023). La partida aprobada se destina en su mayor parte a la amortización anticipada del préstamo del ICO (3,9 M€); además de algo más de un millón para el tratamiento de residuos tras la negativa del pleno a aprobar la ordenanza reguladora de la tasa para financiar el convenio con la Diputación este año. Otros 647.000 € se devengan por el déficit de los servicios de abastecimiento de agua correspondientes a 2022.

Al final de todo este crédito extraordinario sólo se destinan a inversiones 147.376 €, que se destinarán a comprar un etilómetro para la Policía Local, señalización, modificación de las áreas de juego de varios parques, reparación de la cubierta del consultorio de San Andrés, equipamiento de la cocina de un centro de educación infantil, la caldera del colegio Trepalio, la de la Casa de Cultura de Trobajo o la reforma del pabellón del Antonio Valbuena.

Dentro del crédito se incluyen también algo más de 14.000 euros en aportaciones para colaborar en los gastos de las juntas vecinales.

En el pleno se debatieron también mociones como la del PP para limpieza de las alcantarillas; o la de Vox para que la ermita de Trobajo del Camino se declare Bien de Interés Cultural. En este punto la alcaldesa recordó que la ermita es propiedad del Obispado, y que el Ayuntamiento le consultará antes de iniciar ningún trámite.