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El Ayuntamiento de León bloquea con otro informe poder ingresar por el aparcamiento de San Marcelo

Se ampara en un dictamen de secretaría para frenar que la ORA asuma ya la gestión tras 28 meses de retraso
Editorial: 'Derroche de dinero municipal por inacción'

El aparcamiento sigue con la gestión privada pese a que la concesión venció en junio de 2022. RAMIRO

León

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Dos años después de que hubiera vencido la adjudicación de la concesión, tras 50 largos años de explotación privada, el equipo de gobierno de José Antonio Diez se vio forzado por la oposición a renunciar a su plan de privatizar de nuevo el aparcamiento de San Marcelo. Sin mayoría política suficiente, el PSOE se plegó al plan de UPL y PP de que se encomendara el control a la empresa mixta de la ORA. Pero ahora, cuatro mese más tarde, cuando desde la sociedad mixta Eulsa, que cuenta con un 57% de accionario municipal, ya se había recogido el informe jurídico externo encargado para sustentar la viabilidad jurídica, técnica y económica, el alcalde se descolgó esta semana en el consejo de administración con otro informe en paralelo, firmado por la secretaria general del Ayuntamiento de León, que defiende que no cabe la opción. 

Ante la disparidad, explicó ante el resto de miembros, se acoge al documento propio que, como consecuencia, prorroga una situación en precario que hace que el consistorio haya dejado de ingresar más de 841.699,3 euros por no haber asumido la titularidad de las instalaciones.

La nueva maniobra prolonga todavía más los beneficios para la empresa privada, Essera, que en todos estos años no ha pagado canon de concesión alguno. Su aportación se ha limitado a los 5 millones de pesetas (30.000 euros) que aportó en 1972 para la adecuación exterior de la plaza, pero sin pagar factura por este concepto. La corporación de entonces validó que no lo hiciera, pese al informe del jefe de negociado que advertía de que era uno de los requisitos del concurso, y el equipo de gobierno actual ha permitido que mantenga la gestión sin haber promovido la reversión con tiempo suficiente.

La solución «más rápida» pasa por la encomienda a la ORA, como admitió el portavoz de los socialistas, Vicente Canuria, en el Pleno de finales de junio. Ante una pregunta de UPL, el concejal argumentó que esta celeridad se daría con el encargo a Eulsa, «aplicando los artículos 2.3 y 2.4 de los actuales estatutos, que justifican la realización de actuaciones que demande el Ayuntamiento, complementarias al estacionamiento». Aunque ya en esa intervención apostilló que se haría «si contase con el visto bueno de todos los órganos competentes».

El informe externo encargado por Eulsa defiende que en el objeto social de la empresa mixta cabría el aparcamiento subterráneo de San Marcelo, dado que contempla «la realización de actividades complementarias o relacionadas, directa o indirectamente, con el servicio ORA». «Cualquiera de las actividades anteriores podrá ser desarrollada por la Sociedad, total o parcialmente, de modo directo o indirecto, incluso mediante titularidad de acciones o de participaciones en otras Sociedades con idéntico objeto», abundan los estatutos. Sobre esta base se sustentaría el encargo, de acuerdo al trabajo del profesional jurídico, que define los pasos a seguir para que, en un corto periodo de tiempo, el Ayuntamiento de León reclamara la titularidad, asumiera las instalaciones y cediera la gestión a la sociedad, de la que percibe el 57% de los beneficios.

Situación anómala

La concesión venció el 22 de junio de 2022, después de 50 años, pero León sigue aún sin reclamarlo

Pero salvo que haya un cambio, este camino queda bloqueado por el gobierno de Diez, enrocado en el informe de la secretaria general. Los socialistas ya dejaron caer en la sesión plenaria de junio que la otra opción «consistiría en realizar una licitación de un contrato de servicios». Sin que hubiera rastro de gestión pública alguna, ni sus ingresos directos, como llegaron a pedir los leonesistas al reclamar la municipalización, el Ayuntamiento sacaría a concurso el control del aparcamiento para la entrada de una empresa privada. La tramitación demoraría no menos de medio año más la situación para acabar con un modelo similar al que ya existe en la plaza Mayor. Ahí, donde tuvo que abonar una indemnización de 2,3 millones a la constructora de Martínez Núñez, el consistorio sacó un contrato en 2014 por el que apenas recibe 17.099 euros anuales de canon de la UTE formada por Emserco y Sogesel, ésta última integrante de la empresa que , junto a Seys, se lleva la privatización millonaria del mantenimiento de la ciudad promovido por Diez.

Aunque, en el caso de San Marcelo, si no cambia el guion, la concesión sólo se haría hasta marzo de 2027. La fecha coincide con el vencimiento de la concesión de la ORA. Para entonces, el nuevo contrato ya recogería la inclusión del subterráneo en los pliegos de condiciones, en los que entrarían también los del «campo de fútbol, Peregrinos, Santa Nonia si se acuerda con la Diputación de León, etcétera», como explicó en el Pleno de junio el gobierno de Diez, que hablaba de meter «otras gestiones relacionadas como la nueva Zona de Bajas Emisiones» e, incluso «la grúa» que luego adjudicó en solitario.