La junta vecinal de Navatejera se encerró ayer en el Ayuntamiento

El pasado 22 de octubre el Pleno Municipal adoptó por unanimidad un acuerdo, en el que, a propuesta de la alcaldía, se resolvió la moción presentada por el grupo socialista en relación a la financiación de las obras del pabellón polideportivo y de la piscina cubierta de Navatejera, que está siendo ejecutada por la junta vecinal. En la resolución se insta al alcalde, Lázaro García Bayón, para la inmediata ordenación de los pagos de las subvenciones concedidas, que ya hayan sido justificadas, y al tratamiento urgente del resto de la deuda hasta los 600.000 euros, que según Lorenzo Carro estaban consignados en los presupuestos del 2001 y 2002. «Se nos ha acabado la paciencia y nos hemos visto obligados a tomar medidas de presión para que el alcalde nos tome en serio», manifestó el presidente de la junta vecinal que subrayó el apoyo incondicional de los habitantes del municipio. Para él, la gestión del «caudillo», como llama al alcalde, ha sido nefasta. La oficina está precintada A primera hora de la mañana, cuando la junta vecinal iba a encerrarse en la oficina de la oposición, se encontraron con que ésta se hallaba precintada. Por este motivo están en el despacho del concejal de Deporte y Cultura aunque el pedáneo ha dicho, que como ésto siga así, será él quien abra la puerta. «Tiene que ser una inocentada del pasado 28 de diciembre», afirmó Lorenzo Carro que piensa que no hay ningún motivo para que permanezca cerrada. Sus compañeros están haciendo todos los escritos pertinentes para explicar a sus vecinos porque han adoptado esta medida y darles a conocer todos los datos necesarios para que tomen partido. A partir de mañana saldrán a la calle para buzonear las casas y hacer llegar a los habitantes de Navatejera toda la información sobre lo acontecido.. Del mismo modo se han anunciado movilizaciones que perturbarán la normalidad de la localidad. Se tiene previsto que los vecinos salgan a la calle a manifestarse y se produzcan cortes de carretera. «El encierro acabará cuando el alcalde traiga un cheque o un recibo bancario por valor de 600.000 euros», declaró Lorenzo Carro que no saldrá hasta que ésto se cumpla.