Sólo trabaja un vecino de cada diez en cinco ayuntamientos

El despoblamiento y la caída de la población activa, materialmente a la espera de la extinción por muerte natural de los jubilados en las zonas rurales, es tan grave que en algunos de ellos ya queda menos de un 5% de niños, como en el municipio de Gradefes. En otros ocho, como Vegas del Condado, Villamontán de la Valduerna, Riego de la Vega, Castrocontrigo, Valderrueda, Corullón o Quintana del Castillo sólo uno de cada seis habitantes tiene también menos de treinta años, aunque el record lo ostenta éste último municipio con apenas un 10% de «mozos». Pero la situación económicamente más comprometida se da en cinco ayuntamientos, donde, entre jubilados y niños, suman más del 90% de la población que vive de pensiones o, con suerte, del trabajo agrícola de los pocos adultos activos que quedan aún en la zona: Vegas del Condado (97%), Castrocontrigo y Quintana del Castillo (91%), y Riego de la Vega y Villamontán de la Valduerna (86%). Según el informe de la Caixa la tendencia al decrecimiento poblacional de la provincia, al igual que en el resto de la autonomía, parece irreversible ante la fuga masiva de la población joven hacia regiones más ricas durante décadas pasadas. En otras áreas del Estado los bajos índices de natalidad, con el consiguiente rejuvenecimiento de la población a medio plazo, se están paliando con la llagada de inmigrantes, pero no es éste el caso de la provincia de León, una vez cerradas las minas del Bierzo y Laciana.