La persecución policial contra los «sin papeles» se dispara en un año

En el 2001, la Subdelegación del Gobierno ejecutó las órdenes de expulsión contra once inmigrantes sin papeles. Según sus datos, en el 2002 las expulsiones fueron 103, siempre exceptuando las que se arrastran de un año a otro. Igual que hace dos años -a finales de enero del 2001 entró en vigor el reglamento que desarrolla la Ley de Extranjería- los servicios de extranjeros del Cuerpo Nacional de la Policía y de la Subdelegación del Gobierno tramitaron las órdenes a todos aquellos inmigrantes con denegaciones administrativas de solicitudes de prórrogas de estancia, de permisos de residencia y de cualquier otro documento necesario para que los inmigrantes puedan permanecer en León. Estas resoluciones administrativas contienen en cada caso la advertencia al interesado de la obligatoriedad de su salida del país. Las denegaciones del visado una vez que los inmigrantes agotaron los tres meses de plazo máximo para hacer turismo, los que no pudieron constatar su arraigo, los que no pudieron prorrogar su estancia o los que no tenían ningún tipo de documentación ha sido el grupo de extranjeros afectados por las crecientes expulsiones. Según el balance anual de extranjería e inmigración de la Subdelegación del Gobierno, presentado ayer a través de un comunicado de prensa, León continúa siendo la provincia de la comunidad que cuenta con mayor población extranjera regularizada (9.125), seguida de Valladolid (8.964) y Burgos (5.698). Palencia es la que menos tiene (1.929). La población inmigrante en esta situación aumentó durante el pasado año un 27% en toda la comunidad, pasando de 33.170 personas en diciembre de 2001 a 43.348 en diciembre de 2002. Uno de los nuevos servicios con los que contarán los extranjeros a partir de este año en León es la oficina única de atención a inmigrantes, una especie de ventanilla única para llevar a cabo toda la tramitación administrativa en esta materia al objeto de «lograr una mejor atención a la población inmigrante y agilizar los procedimientos», indica el comunicado de prensa. El mismo balance incluye un análisis estadístico, del que se deduce que el fenómeno de la inmigración adquiere progresivamente un mayor protagonismo. No obstante, señala, la incorporación de extranjeros se está produciendo «en términos de normalidad, sin problemas de integración y con acceso al mercado del trabajo. Prueba de ello es el alto porcentaje de afiliación a la Seguridad Social registrado entre los inmigrantes. En diciembre, el número de afiliados a la Seguridad Social representaba ya un 44,12% de la población foránea, es decir 19.124 personas en Castilla y León. Por países de origen, Portugal, Francia, Marruecos, Bulgaria, Colombia, Ecuador, República Dominicana, China, Rumanía y Cuba son las diez nacionalidades que superan el millar de inmigrantes residentes en la comunidad.