El Claustro conoció ayer el nuevo Estatuto y aprobó la concesión de cinco medallas de oro de la ULE
La Universidad basa la obtención del sello de calidad en el alumnado
Los miembros del Claustro de la Universidad de León conocieron ayer el proyecto del nuevo Estatuto de la ULE, elaborado en los últimos meses por
El Claustro se reunió ayer en la Escuela de Industriales aunque la afluencia no fue masiva
El miembro de la ponencia encarga de la redacción del Estatuto, César Chamorro, fue el encargado de presentar este documento, el principal cambio ordenado por la Ley Orgánica de Universidades (LOU). El texto consta de 235 artículos distribuidos en siete títulos, dos disposiciones adicionales, siete transitorias, una derogatoria y otra final. En el preámbulo se considera que para la Universidad de León «es un reto acrecentar su prestigio ante la sociedad» al tiempo que afirma que «libertad, igualdad, progreso, responsabilidad y transparencia son principios sobre los que construir el futuro». También se incide en la importancia de los alumnos y así se dice que «los estudiantes son el mejor patrimonio y la razón de existir de la universidad. De su desarrollo profesional y de su éxito profesional dependerá, en gran medida, el sello de calidad que se consiga. A partir de ahora, se abre el plazo de presentación de enmiendas parciales o totales que se prolongará hasta el día 21 de marzo. Una enmiendas que se votarán en la próxima reunión que mantenga este órgano. Por otro lado, el Claustro también dio el visto bueno a la concesión de cinco medallas de oro de la Universidad de León. Las personas que recibirán este reconocimiento son el profesor emérito de la ULE, Miguel Cordero del Campillo; el que fuera decano de la Facultad de Veterinaria y presidente del Colegio Oficial de Veterinarios, Miguel Abad Gavín; y al comandante militar aéreo del Aeropuerto de Asturias y ex coronel jefe de la Base Aérea de La Virgen, Antonio Valderrábano. A título póstumo también se han concedido otras dos medallas. Una de ellas al fallecido catedrático de Filología Clásica, Gaspar Morocho Gayo, y otra al reconocido pediatra leonés, Luis Fernández Picón, vinculado a la ULE desde 1996.