Caos en el Hospital

El Ayuntamiento de León prevé la construcción de un aparcamiento de más de setecientas plazas en la zona frontal del hospital, ahora ocupada por un estacionamiento provisional. No obstante, la obra requiere la recalificación de unos terrenos, condición sine qua non para la cesión de este solar por parte de sus propietarios. La modificación de la calificación del suelo debe aprobarse con el Plan General de Ordenación Urbana y aunque existe ya un acuerdo con los dueños éstos rechazan la cesión hasta que no se haga oficial la recalificación. El aparcamiento tendría entrada desde la Ronda Este y su ubicación en la entrada de consultas externas lo haría el más utilizable por los pacientes y visitas. La fórmula elegida por el consistorio es la creación de una sociedad mixta de gestión que construya y explote el servicio. El precio, similar al establecido en los aparcamientos públicos del centro. Agilizar los trámites Éste sería, según el gerente Carlos Díez de Baldeón, el primer aparcamiento con el que contar y para adelantar los trámites se reunirá la próxima semana con el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de León. La apertura de este recinto posibilitaría la construcción de otro junto al edificio San Antonio Abad, también ocupada ahora por los automóviles y en el que se encuentra el helipuerto. El aparcamiento, contemplado en la segunda fase de ampliación del Hospital, dispondría de 900 plazas. La construcción de este segundo inmueble no podrá comenzar, como pronto, antes de final de año cuando se acabe la primera fase de ampliación del centro sanitario y se redacte el proyecto de la segunda. Aunque descarta hablar de plazos y plazas, Carlos Díez de Baldeón reconoce que le gustaría poder «agilizar los trámites al máximo» y apunta que serían necesarios, por lo menos, 1.800 lugares de estacionamiento. «El número final depende de las edificaciones y de que los aparcamientos puedan construirse en subterráneo para no interferir en los bloques de asistencia». Baldeón rechaza la definición de caos en la situación actual pero admite que «hay dificultades de aparcamiento». «Nunca la superficie va a ser suficiente y es necesario que acudamos a otras soluciones como potenciar la utilización del transporte público», recalca. Hasta que esas soluciones lleguen, los coches se amontonan en todos los huecos en las cercanías del centro donde las obras no han hecho sino empeorar una situación penosa. La maquinaria de las obras ocupa cientos de metros cuadrados que antes estaban destinados a estacionamiento y que impiden encontrar lugares para los más de 3.000 vehículos que se calcula acuden, cada día, al hospital. Los accesos, los solares libres en la Ronda o cualquier hueco es viable para dejar el coche varios minutos. En definitiva, un caos automovilístico de primer orden que durará más de dos años. Como poco.