León aclama a su patrona

Bajo un sol radiante, que los acompañó durante todo el día, especialmente por la tarde, treinta mil leoneses según las estimaciones oficiales procesionaron a la patrona de su ciudad, la Virgen del Camino, desde el santuario al que da nombre hasta la Catedral. Balcones engalanados con mantones y banderas de España y de León, pendones venidos de toda la provincia, vítores, loas y cánticos acompañaron a la Virgen en las más de seis horas que duró su traslado desde La Virgen del Camino hasta su «nuevo hogar», como lo llamó el obispo, Julián López Martín, en la Catedral, donde permanecerá hasta el próximo día 31 de mayo, fecha en la que con los mismos honores regresará a su santuario. Tres fueron las paradas que se hicieron a lo largo del camino: la primera en la ermita de Trobajo del Camino, la segunda en la iglesia de San Marcos y, por último, en la iglesia de San Marcelo. En Trobajo del Camino, los vecinos de San Andrés agasajaron a la Virgen con flores y cánticos. En la iglesia de San Marcos los ayuntamiento del Voto -Valdefresno y Villaturiel-, además del de Valverde de la Virgen hicieron entrega de la imagen al municipio de León. En este lugar, se procedió a cambiarle la corona y el manto y la corporación municipal de la capital, con su alcalde Mario Amilivia a la cabeza, portaron las andas ayudados por otros devotos. Nuevamente salves, rezos, gritos de guapa y alguna que otra lagrima de emoción contenida fueron las imágenes que los miles de leoneses, que se agolpaban en la plaza de San Marcos desde horas antes, ofrecieron a su patrona. Desde aquí, la Virgen emprendió camino por el paseo de Condesa y Ordoño II para, tras una nueva parada en la iglesia de San Marcelo, donde el Ayuntamiento de León la entregó al Cabildo catedralicio, llegar a la Catedral, donde la recibieron el obispo de ladiócesis, Julián López Martín, el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, y nuevamente miles de leoneses que esperaban con impaciencia.