El pacto entre el PSOE y la UPL se consagra con el reparto de poder

Hasta una docena de veces repitió el nuevo alcalde de la ciudad la palabra «equipo» para referirse a la alianza entre socialistas y leonesistas. «Cohesionado y solidario». Así quiere trabaje y se defina el equipo de gobierno que durante los próximos cuatro años gobernará la ciudad. «No existe en este colectivo división entre un partido y otro, como hasta ahora ha ocurrido; seré el portavoz del grupo que trabajará para resolver los problemas de León», señaló Francisco Fernández. Ayer era el día fijado por los socios de gobierno para desvelar el contenido del documento mediante el que se selló el pacto y que fue rubricado el viernes por Fernández y Rodríguez de Francisco. No hubo sorpresas en los anuncios: un mero reparto de áreas de poder y siete dedicaciones exclusivas entre UPL y PSOE . De este modo, los leonesistas contarán con cinco concejalías, algunas de ellas con diversas áreas, además de una mancomunidad y la presidencia de momento de dos consejos de administración (Eulsa e Ildefe). También en las nueve tenencias de alcaldía fijadas, tres serán ostentadas por ediles de la UPL. Además, contarán con dos dedicaciones exclusivas. Por lo que se refiere a los socialistas, dirigirán once áreas. Igualmente, llevarán Aguas y presidirán la Mancomunidad de Residuos Sólidos y el consejo de administración de Emimalsa. A la hora del reparto del poder entre los integrantes del equipo de gobierno se han tenido en cuenta «afinidades, grado de conocimiento en las áreas y la experiencia», según manifestó Fernández, quien también subrayó la existencia del diálogo y el acuerdo para cerrar estos acuerdos. Probablemente, hasta la próxima semana no tendrá lugar la primera Comisión de Gobierno ni el Pleno de ratificación oficial de todos los cargos. Para que todos los ediles puedan ir ya trabajando en sus correspondientes áreas, el nuevo alcalde ha firmado ya los decretos que avalan a cada uno en su departamento. En cuanto a otros aspectos que hayan podido influir en la rúbrica del pacto, Fernández comentó que el acuerdo se ciñó a asuntos municipales. Confía en poder mantener con sus socios de gobierno «una realidad de normalidad, aunque reconoce que en un momento dado podrá haber lógicamente tensiones; todo nace con un aire de naturalidad y yo no veo nada extraño». Defendió el pacto como «una alternativa muy legítima para gobernar, no se trata de humillar a nadie, ni desde luego es un acuerdo basado en el odio; además, aspiramos a llegar acuerdos con la oposición». El resto del documento del pacto está más centrado en una declaración de intenciones y no fue facilitado a los medios al definirse como un «documento privado», aunque el alcalde leyó en voz alta los acuerdos más destacados centrados en la participación, el diálogo y el consenso.