Fernández: «Haré lo imposible para que elacuerdo con los leonesistas funcione»
«Haré todo lo posible para que este pacto funcione», dijo ayer el nuevo alcalde de la ciudad, quien aseguró que por ahora su relación con Rodríguez de Francisco no ha tenido ningún problema ni personal, ni político. «A pesar de que algunos tengan muchas ganas de que este acuerdo no tenga demasiada vida, vamos a decepcionarles». Insistió también Fernández en que será el alcalde de todos. «No me importa el carné de cada uno». Cree, además, que las elecciones generales del próximo año no afectarán al acuerdo rubricado en el Ayuntamiento entre socialistas y leonesistas. Descartó, igualmente, que el hecho de que el Gobierno central y la Junta sean del PP no supondrá un menosprecio para el consistorio leonés en cuanto a proyectos y subvenciones. «Los ayuntamientos de Palencia y de San Andrés, por poner un ejemplo, son socialistas y no han tenido problemas. Nosotros hablaremos con todas las instituciones para luchar por León», manifestó Fernández. En tono irónico añadió que él sólo estaría al frente de la Alcaldía un máximo de dos mandatos. Por su parte, el primer teniente de alcalde, José María Rodríguez de Francisco, indicó que el pacto nace con «intención de servir a los leoneses» y descartó de nuevo que se trate de un acuerdo basado en el odio. «Ahora me odian y si se reeditara la Guerra Civil, me fusilarían». Destacó que el pacto se fraguó desde la libertad y pidió un plazo de al menos cien días para que la coalición fuera valorada. «Porque ya sé que la palabra y el papel lo aguantan todo». Volvió otra vez a arremeter contra sus ex socios de gobierno y recordó que durante los últimos años tuvo que soportar «vejaciones constantes; ahora la gente no acepta el juego democrátivo y creen que el poder viene de Dios y, en realidad, viene de las urnas». De Francisco afirmó que el famoso Pacto por León se ha cumplido en un 80% y el 20% restante se encuentra en vía de ejecución. «La UPL con el PP gobernando agotó sus expectativas de reivindicación». También descartó el pacto con el PSOE como venganza contra los populares. «Que nadie vea en esto una vendeta personal, no existe. Somos un equipo de gobierno con proyectos comunes como empleo y vivienda social». Dijo, asimismo, que no quiere ser alcalde de León, ni presidente de Caja España. «Quiero acabar con estas especulaciones e intereses que son despreciables». Además, dejó claro que «pactar con De Francisco no es difícil». Volvió a reiterar que el presidente de la Junta le ofreció votar al número dos del PP como alcalde. «Es cierto y es probable jurídicamente».