Diario de León
Miembros del equipo veterinario de León realizan la inseminación laparoscópica a la tigresa

Miembros del equipo veterinario de León realizan la inseminación laparoscópica a la tigresa

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L. U. / Agencias - león
León

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LaVeterinarios de la Universidad de León y del Zoológico de Valencia completaron el proceso de inseminación artificial a una tigresa blanca con esperma extraído de un tigre de Bengala que tiene un gen blanco, con el objetivo de conseguir una camada de felinos blancos que nacería dentro de tres meses en estas instalaciones. El director del zoo de Valencia, Ignacio Docavo, quien explicó que es la primera vez que se lleva a cabo una operación de este tipo en una tigresa blanca en Europa, señaló que han tenido que recurrir al método artificial porque estos felinos son animales solitarios y existía el peligro de que al juntarlos se hiriesen. Los protagonistas de esta peripecia, que se ha desarrollado durante varias horas en el Zoológico de Valencia, han sido «Violeta», una tigresa blanca de 3 años, y «Timonel», un tigre tabby de 8 años, que tiene una coloración más clara que los tigres de Bengala y un gen blanco. Los veterinarios leoneses, del equipo de investigación de la Facultad de Veterinaria dirigido por el profesor Luis Anel, procedieron en el pasado mes de abril a la extracción del semen del felino mediante una electro-eyaculación, y posteriormente han procedido a inseminar a la hembra mediante una laparoscopia. La tigresa había sido tratada con hormonas que le habían sido inyectadas para que el óvulo estuviera preparado. Los investigadores Mercedes Álvarez, Vanesa garcía, Felipe Martínez, Nerea González, Francisco Nieto, Félix Martínez y Luis Anel completaron la primera parte del proceso, que requiere unos plazos de estudio y observación, con la estracción de semen del tigre macho. Este mismo equipo que se ha familiarizado desde 1989 con procesos de reproducción asistida de varias especies animales, salvajes, en cautividad y doméstico. La tarea que más transcendecia social ha ganado en los medios de comunicación de las que realiza el Itra -Ule de la Facultad de veterinaria de León es el de la biotecnología asistida con el oso pardo que habita en la Cordillera Cantábrica. La técnica de este equipo de investigación supone, a nivel científico, una tabla de salvación de la especie estigmatizada con el peligro de extinción. Luis Anel, que es profesor de reproducción animal en la Facultad de Veterinaria de León, dirige al grupo de investigadores que colaboran en este proyecto con el Parque natutal de Cabárceno. Entre los términos técnicos que definen su tarea está, también, el banco de semen, de recursos genéticos, con el que se comenzó a trabajar hace cinco años, tras la merte del oso «Cuervo», en Somiedo, que fue trasladado a la Facultad de Veterinaria de León, en donde se conserva ahora el líquido seminal del oso. Es posible que se utilice en un futuro próximo. La anécdota de la estimulación En relación con el programa pionero en España de la inseminación de la trigresa «Violeta», el proceso ha llevado también sus tiempos, marcados por el criterio científico de los investigadores y el proceso biológico de la hembra de tigre. El semen elegido para la inseminación se filtró por unos controles de calidad que determinaron su viabilidad antes de iniciar la congelación (de forma controlada hasta -100 ºC); leugo se almacenó en dosis en nitrógeno líquido a _196 º Cpara garantizar condiciones idóneas de reserva. Luis Anel, el grupo de investigadores de reproducción animal asistida que dirige, el Itra-Ule, aceptó el reto del zoológico de Valencia, planteado por sus rectores, con conocimiento de causa sobre el contorno de pros y contras que encierra el proceso. Fecundar un óvulo de la tigresa en cautividad, según se utilice la técnica vaginal o laparoscópica, tiene un cincuenta por ciento de posibilidades de éxito. Si resultan éstas, en tres meses, «Violeta» aportará una camada de tigres blancos. Docavo explicó que la anécdota de este proceso se produjo cuando los veterinarios acudieron a un sex-shop para adquirir unos «vibradores especiales» con los que lograr una mayor estimulación de la tigresa, y los vendedores «no se querían creer» quién era la destinataria de sus artículos. Anécdota a parte, el proceso puede abrir más puertas en la investigación en este campo. El resultado del proceso de fecundación se verá en 3 meses Es factible el nacimiento de cachorros blancos

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