El Stele dice que equiparar la religión a otras materias es ilegal
La equiparación de la asignatura de religión con respecto al resto de materias ha levantado ya las primeras protestas por parte de los colectivos de profesores de todo el territorio nacional, con más relevancia en los agrupados bajo las siglas STE (Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza). El departamento leonés Stele (Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de León) lanzó ayer un duro comunicado en el cual asegura que esta medida que el Gobierno quiere imponer «es claramente inconstitucional y supone retroceder a los tiempos de la dictadura, cuando el Estado era confesional y la iglesia sacaba a Franco bajo palio». El sindicato afirma que la medida refleja «la vena más rancia y ultraderechista del PP», lo que supondrá la «dura respuesta» de los sectores que defienden «una educación laica». Entre los aspectos más asaeteados de la normativa del Gobierno, los sindicalistas señalan que «incumple la normativa laboral más elemental cuandio permite que la propia Iglesia contrate y despida, sin ningún tipo de control, al profesorado de religión que, sin embargo, cobra su sueldo del erario público». Los Stes presentarán, cuando el decreto de equiparación se publique en el BOE, recurso contra el mismo, «en defensa de la enseñanza laica y de la legalidad vigente, en el convencimiento de que los poderes públicos pueden garantizar perfectamente el derecho constitucional de los padres a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral acorde con sus propias convicciones, sin que tenga que estar incluida entre las materias a impartir».