Valverde o San Andrés como las alternativas para la instalación

En el esbozo de proyecto presentado por Francisco Fernández no se detalla en ningún momento la ubicación de las nuevas instalaciones, aunque es seguro según sus cálculos que las exigencias espaciales impedirán que se realicen dentro de la actual demarcación. La idea de impulso del área metropolitana adelgaza la lista de posibilidades, reducida aún más a tenor del crecimiento urbanístico: San Andrés del Rabanedo o Valverde de La Virgen son las únicas que recogen todas las exigencias. Aunque las afinidades políticas pudieran concluir en un análisis fácil que se decantaría por la primera (gobierno socialista de Miguel Martínez), su potencial aumento de población y urbanismo limitan las opciones y dan ventaja al municipio regentado por el leonesista David Fernández. Francisco Gutiérrez diseccionó ayer las obras que comenzarán para ampliar la pista del actual aeropuerto y aseguró que «el tope marcado por los diferentes viales» impide que «puedan aterrizar o despegar reactores de vuelos internacionales». El socialista citó como ejemplo la pista del aeropuerto de La Coruña y recordó que «la diferencia de presión motivada por la altitud» obiliga a que en un cálculo análogo la futurible pista leonesa «debería tener como mínimo 3.000 metros». En estimaciones remitidas por esta misma fuente, la ampliación de la pista actual se enmarca en un trazado de 3.500 metros (una línea perpendicular entre la A-66 y la futura Ronda drel Noroeste). Pese a que a primera vista se pueda concluir que es más que suficiente, hay que considerar que los espacios reservados de distancia con relación a las infraestructuras (las tres carreteras que marcan el actual areopuerto) limitan considerablemente el terreno e imposibilitan alcanzar el mínimo manifestado por Gutiérrez.