Cuatro leoneses representan por ahora a la provincia, uno menos que antes
En la pasada legislatura, cinco leoneses ocupaban puestos de responsabilidad en la Junta de Castilla y León. Isabel Carrasco como consejera de Economía y Hacienda, Antonio Silván como secretario general de ese mismo departamento, Fernando Mallo, en la Dirección General de Estadística, Eduardo Fernández en la de Administración Territorial y Aranzazu Miguélez, en la de Asuntos Europeos. Si bien en esta nueva etapa se mantiene un leonés como consejero, Antonio Silván, la presencia de la provincia desaparece en la Secretaria General de Economía y Hacienda. Además, de los tres directores generales que presumían de su condición de leoneses, ya se ha confirmado la marcha de Aranzazu Miguélez, mientras que el nombre del berciano Eduardo Fernández, hombre de confianza del consejero Alfonso Fernández Mañueco, se baraja como posible nuevo delegado territorial de la Junta en León, en sustitución de Luís Aznar. Según esto, y de continuar el ritmo de nombramientos seguido hasta ahora, en la actual etapa se pasaría de cuatro directores generales leoneses a tan sólo uno. Como contrapunto, de las dos viceconsejerías creadas en esta legislatura, una está ocupada por un leonés de pro como es Raimundo Torío. En cuanto al resto de cargos de responsabilidad, esta misma semana se hacía público el nombramiento de otro vallisoletano, Juan Rodríguez, como nuevo gerente de la Agencia de Desarrollo Económico.