Las centrales cifran el seguimiento en el 80% y la dirección en un 25%
Empresa y sindicatos discrepan en la incidencia del paro en Feve
El día 9 está prevista una jornada de huelga de 24 horas, coincidiendo con el Descenso del Sella
Más del 80% de los trabajadores de Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE) de León, según los sindicatos, un 25% según la empresa, secundaron ayer la tercera jornada de paro convocada por los sindicatos ante las discrepancias en la negociación del convenio colectivo que regula el sector. El presidente del comité de empresa de Feve, Fulgencio Bandera, denunció ayer en declaraciones a los periodistas «los excesivos servicios mínimos» impuestos por la dirección de la empresa así como las cifras que ofrece la misma sobre la incidencia de huelga, ya que «incluye entre los que no secundan las movilizaciones a los trabajadores que estamos de vacaciones». Bandera consideró «importantes» estas movilizaciones desatadas ante las discrepancias de las partes en la negociación del convenio colectivo, que debería haberse concretado ya en enero del 2002. Los sindicatos exigen, según el sindicalista, una subida salarial para el próximo año de un dos por ciento y que se aplique otro dos por ciento de subida a la productividad. Desde el comité de empresa se deja claro que continúan abiertos a la negociación, aunque Fulgencio Bandera puntualizó que estos momentos no hay fijada fecha alguna para realizar nuevas reuniones que cierren el conflicto, pero también se afirma que se mantendrán las jornadas de paro previstas para los próximos días 8 y 9 del presente mes de agosto. Los paros en Feve comenzaron el pasado 28 de julio, según recordó Bandera, que anunció que el próximo día 9, coincidiendo con el Descenso del Sella, los trabajadores realizarán una jornada de paro general de veinticuatro horas, en lugar de las las cuatro horas diarias que están parando en estos momentos, dos por la mañana y dos por la tarde. Además, el sábado día 9 tienen previsto realizar una concentración que esperan sea masiva ante la estación de Feve en Ribadesella (Asturias), para expresar su malestar por su situación laboral al ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, que presumiblemente estará en el Principado por esas fechas.