La Guardia Civil enseña el oficio

Un locutor acompañó con explicaciones minuciosas cada acción demostrativa de las unidades de la Guardia Civil. Fue un ensayo a modo de aproximación entre la actividad del agente y la sociedad leonesa, que disfrutó de una jornada de puertas abiertas y exhibición de las unidades dependientes de la comandancia de León: Tráfico, Seprona, Especialistas en Explosivos, GRS. Por un día, la acción fue simulada. Y correspondida con más de una ovación por parte de la asistencia que se citó en el interior del acuartelamiento de El Parque, escenario de la representación, en el programa de actos conmemorativos de la patrona del cuerpo policial, la Virgen del Pilar. La actuación de la unidad del Tédax, de los efectivos técnicos especialistas en desactivar artefactos y explosivos, arrastró la curiosidad del público por el riesgo presencial del ejercicio: primero, un perro adiestrado en la localización de explosivos, dispuesto a sentarse al lado del objetivo hasta que un cuidador le disuade con un premio; luego, un robot de fabricación nacional capacitado para acercarse hasta el artefacto y para provocar una explosión controlada. Más tarde, un agente ofreció una porción de su entrenamiento diario. Ataviado con un traje de fibra , con 35 kilos de peso encima, más los cinco del casco que le aislará de la explosión, se acercó a cuarenta centímetros de la carga explosiva y procedió a completar una tarea cotidiana. El público, a pesar de la pauta dictada por el narrador «la carga será detonada a partir del grito fuego» no pudo evitar el sobresalto. «Desgraciadamente, muchas veces no es de exhibición o por entrenarse», recordó el agente, mientras explicaba las razones que motivaron la creación de la unidad de Tédax en España. Paralela a la exhibición, entre los edificios de viviendas y oficinas del cuartel de la Guardia Civil de León, se organizó una exposición de los medios con los que trabajan los distintos efectivos de la Guardia Civil: los radares de última generación que se emplean para el control de la velocidad en las carreteras leonesas, las básculas móviles, las patrullas ligeras, los vehículos que emplea la Agrupación de Tráfico. Entre los medios técnicos expuestos se pudo observar un helicóptero de los empleados en rescates especiales, una tanqueta y furgones especiales para los grupos de intervención del Grupo Rural de Seguridad número 6, con sede en La Virgen del Camino. La representación de las unidades del GRS ocupó la mayor parte del programa de exhibiciones que completaron el Seprona y Tráfico. La toma del edificio cabecera del acuartelamiento del El Parque resultó precipitada. La fábula obligó a fingir que el inmueble era un refugio de delincuentes peligrosos; en segundos cayeron agentes por las paredes, entraron en el interior y redujeron a los inquilinos. No fue la única demostración de los GRS que levantó aplausos entre la asistencia civil. Durante los últimos años, el grupo de élite que cuenta con doscientos hombres en La Virgen del Camino ha realizado misiones de alta seguridad en reuniones gubernamentales internacionales celebradas en Madrid, Santiago, Lanzarote, Barcelona, Santander, La Rioja y Sevilla. En el expositor dedicado a esta unidad colgaban fotografías del paso de estos agentes por destinos de Bosnia, Kosovo o Mozambique, en misión de refuerzo para la fuerza de paz internacional que bajo el mando de la Osce intervino en esas zonas de conflicto. La jornada de puertas abiertas, que inicia la cuenta atrás para la festividad del Pilar, el próximo día 12 de octubre, acercó el cometido de la Guardia Civil a la sociedad. Ese era el propósito del programa, más allá de descubrir los secretos de los coches camuflados de tráfico o de las tanquetas, o familiarizarse con el argot: control de masas, protección de personas, defensas al frente o barreras de contención.