Un órgano de coordinación para unificar los criterios de actuación de la Junta en todas las provincias
El consejo territorial, del que forman parte los nueve delegados territoriales de la Junta, se constituyó ayer en León con el objetivo de convertirse en «el instrumento fundamental para desarrollar la política única al servicio del programa único» del Ejecutivo autonómico. Además, según palabras de Mañueco, la Junta pretende que este sea el «verdadero órgano de coordinación de la política territorial». El consejo territorial se creó ya en la pasada legislatura y regula el funcionamiento y la composición de los delegados territoriales, según recordó Mañueco, que explicó que el reto que se plantea el Gobierno es impulsar su cometido. Así, su función principal de este órgano deliberante es «coordinar la administración periférica de la Junta en la Comunidad, unificar criterios de actuación del programa de Gobierno en las provincias y realizar un seguimiento de los temás de interés general».