Las eléctricas exigen al Gobierno concreción y un plan energético para aclarar el futuro
Las compañías eléctricas más importantes de España, las de nuevas energías renovables y algún experto coincidieron ayer en señalar en las jornadas de FIA-UGT celebradas en León que es imprescindible que el Estado se defina cuanto antes y elabore planes de emisiones, modernización de instalaciones de generación y distribución, la reserva estratégica de carbón e incluso sobre la política de desarrollo de renovables para que las empresas sepan cuanto antes cómo acometer las inversiones necesarias en modernización de instalaciones y de creación de otras nuevas para satisfacer la demanda eléctrica. El más destacado en este sentido fue el director de Estrategia de Negocio de Endesa, Ramón Jiménez, quien ratificó la apuesta de su compañía por el carbón autóctono y por el compromiso modernizar Compostilla II -para mantener un mix equilibrado de producción y garantía de abastecimiento-, a la par que otras en el resto de España y la creación de nuevas instalaciones de ciclo combinado y de energías renovables (con importante presencia en Castilla y León), si el Gobierno elabora una «verdadera» planificación energética. Las eléctricas coinciden en que la actual es difusa y depende en exceso del Estado, que es necesaria mayor intervención en la política de generación para esclarecer los objetivos y las condiciones que permitan a las empresas planificar a medio y largo plazo con más seguridad; en especial en cuanto al tema de la compra-venta de derechos de emisión de gases de efecto invernadero. Apoyo público Señalan que debe haber además un apoyo público a la modernización, a la compra de esos derechos -la cuota negociada con la UE por España es insuficiente, coinciden todos- y a las nuevas inversiones para satisfacer la demanda creciente. En cuanto al carbón, piden definición de la reserva en cuantía y ubicación para planificar sus instalaciones para el consumo del mismo.