El alcalde afirma que «las normas ahora son claras y ya no se puede hacer lo que sea»
El Ayuntamiento de Sariegos pretende lavar su imagen de municipio especulativo y hacer borrón y cuenta nueva sobre los chalés construidos con irregularidades legales. Monteleón abrió la brecha de los desmanes urbanísticos en la década de los setenta. Más de 150 propietarios que se vieron perjudicados por defectos en las obras de sus casas recurrieron a la vía judicial. El proceso coleó hasta el año pasado, por la complejidad de las compensaciones económicas. En los ochenta y la primera mitad de los noventa se construyeron varias urbanizaciones sin respetar los trámites de recalificación de suelo y cesión de los aprovechamientos urbanísticos, al ponerse en marcha sin sus pertinentes planes parciales. Un problema que enfrentó a la Junta y al Ayuntamiento y que se saldó con la inhabilitación, entre otras personas, del anterior alcalde. Crecer sin sustos El actual regidor, Ismael Lorenzana, asegura que «las normas subsidiarias ahora son muy claras y ya no se puede hacer lo que sea en el municipio. Todo se debate en pleno y se ajusta a la legalidad, porque queremos crecer, pero de un modo justo». Los presupuestos de Sariegos se han podido elevar gracias al urbanismo, que reportará casi dos millones de euros al Ayuntamiento en los próximos años. En un municipio con muy poca actividad industrial, convertido en lugar de residencia, la única fórmula «para tener unos presupuestos saneados y en expansión la representa el desarrollo urbanístico», comenta.