«La Bolsa te podrá gustar mucho, poco o nada, pero es inevitable»

El director ejecutivo de la sociedad de valores Morgan Stanley ofrecerá esta tarde en León (20.00 horas, teatro Emperador) una conferencia sobre su visión de la situación actual de los mercados y las previsiones de futuro, un panorama que si bien no se le antoja como propicio para la euforia, sí que considera sin embargo sensiblemente mejor que el que se ha vivido en los últimos meses. -Los analistas llevan más de dos años anunciando que la recuperación llegaría en el segundo semestre; ¿será éste el definitivo? -Yo creo que éste en el que estamos se confirma un cambio de tendencia, ¿pero qué se entiende cuando se habla de recuperación? La confirmación de que lo peor se ha quedado ya atrás, yo creo que sí que ha llegado en este segundo semestre, aunque para que se confirme que este movimiento es estable, pues depende de donde, porque en Estados Unidos parece que está a punto de confirmarse, mientras que en Europa parece que estamos más retrasados y quedan todavía algunas dudas. -El movimiento lateral y la volatilidad de los mercados, ¿son coyunturales o hay que aprender a vivir con ellos? -Yo ahí no soy tan, tan optimista. Hombre, la Bolsa ha tenido un comportamiento este año muy bueno, lo que pasa es que parte de un nivel tan bajo que eso no hace que los niveles actuales sean satisfactorios, sobre todo para el que entró hace dos o tres años, que tiene que estar muy frustrado. Si se mira el rendimiento de los distintos activos en el año 2003, probablemente la Bolsa ha sido el más rentable, y eso es así, pero ¿vamos a tener años de crecimientos espectaculares de la Bolsa? Pues yo creo que no por varias razones: primero porque va a costar olvidarse de lo que ha pasado y que la gente confíe en los mercados financieros e invierta en ellos con la alegría que lo ha hecho, y luego porque en los mercados europeos hay ciertas incertidumbres importantes: está la duda sobre el pacto de estabilidad, el déficit de Francia o Alemania, sobre la ampliación. Europa no está en un momento de gran estabilidad ni gran confianza; todo lo contrario. -Cuando habla de que costará olvidar lo que ha pasado, me imagino que se refiere a la evaporación de las «puntocom», ¿pero cómo han influido en la confianza de los inversores casos como el de Enron o el de Gescartera? -En Estados Unidos fue más serio, porque sí que hubo una desconfianza en el sistema de información; en España el caso de Gescartera fue un caso de picaresca como el que se puede dar en cualquier otro sector, aunque tiene más repercusión por ser donde es y porque los de guante blanco despiertan más morbo que un ratero común, pero yo no creo que Gescartera tenga capacidad de dañar seriamente al sistema. -¿La comisión Aldama y los códigos de gobierno garantizan los intereses del pequeño inversor? -Lo que trata la comisión Aldama es que la gente sea buena, que las empresas sean transparentes, que no haya conflictos de intereses entre los administradores, pero como tampoco tiene unos mecanismos coercitivos muy claros ni tampoco en el mercado se ha consolidado como una norma de obligado cumplimiento, pues no pueden garantizar nada, pero yo creo que el proceso es bueno porque cuanta más transparencia haya en las empresas, más confianza habrá entre los inversores. -En los países más avanzados están creciendo los fondos de inversión socialmente responsables, ¿cree que llegarán a España? -No soy ni detractor ni entusiasta; me parece muy bien que existan y constituye otro paso más, pero no es fácil definir qué es una empresa éticamente responsable, puede serlo con el medio ambiente, con sus trabajadores, con sus clientes, con sus accionistas, con sus proveedores... Eso es muy difícil, pero que exista esta preocupación ya es un paso. Nosotros tenemos uno de estos fondos éticos donde hay una comisión que ya criba al menos los casos más evidentes. De nuevo son avances, y yo creo que esas cosas vienen para quedarse, que la conciencia social y la preocupación por los temas no estrictamente del dividendo, sino también por la responsabilidad social, por el empleo y por el medio ambiente va a ser una constante y va a ir a más. -¿Sigue llegando gente a la Bolsa, o el capitalismo popular ya ha tocado techo? -Yo creo que también irá a más. Los mercados financieros te podrán gustar mucho, poco o nada, pero son inevitables. Mientras este mundo esté basado en una economía de mercado va a haber un mercado financiero, y mientras más avance la economía y mejore la renta habrá más capacidad de ahorro, y una parte del ahorro va a parar a la Bolsa.