Los vecinos de Chozas exigen que no se autorice la ampliación de RMD

Los vecinos de Chozas de Abajo se manifestaron ante el Ayuntamiento de esta localidad contra la incineradora de Ardoncino. Los vecinos se movilizaron porque recientemente el alcalde, Roberto López Luna, ha anunciado que daría el permiso para poner en marcha la segunda fase del proyecto de la empresa RMD. Los cerca de 200 vecinos que acudieron a la protesta armados de pancartas, silbatos, altavoces, cornetas, cacerolas y latas, gritaban «Roberto, traidor, sal al paredón», «Roberto, traidor, prometiste no a la incineración» «la Junta y RMD a León quieren joder». Los vecinos intentaron acceder al Ayuntamiento para hablar con el alcalde y la Guardia Civil impidió la entrada del grupo y sólo permitió que entrasen los representantes. El alcalde no recibió a los tres representantes y les argumentó que «no tengo tiempo de recibiros, estoy muy ocupado». El concejal de obras, Tino Modero, que es precisamente el encargado de llevar el asunto de las licencias de RMD fue abucheado por los vecinos cuando abandonó el Ayuntamiento. La protesta continuó durante más de una hora, hasta que el alcalde abandonó las dependencias del Ayuntamiento. Roberto López no realizó ninguna declaración y entre insultos, abucheos y peticiones de explicaciones logró llegar hasta su vehículo, gracias a la protección de los 7 agentes de la Guardia Civil. Los vecinos realizaron una sentada alrededor del coche de Roberto López, para que no pudiera arrancarlo. El momento de mayor tensión se produjo cuando la Guardia Civil se dispuso a retirar a los vecinos, llegándose a producir violentos forcejeos entre éstos y las fuerzas del orden. La Guardia Civil quiso detener a alguno de los manifestantes alegando escándalo público, pero al final no se produjo la detención, ya que el resto de vecinos pedía la detención de todo el grupo. Numerosas quejas Al acto acudieron Yolanda Domínguez, presidenta de la junta vecinal de Antimio de Arriba, José Fidalgo de Antimio de Abajo y Maite López de Banuncias, que son las tres localidades que se han posicionado en contra de la incineradora. Además tienen abierto un contencioso ante la resolución de Industria que describe que no quedan residuos en la zona y afirman que está la empresa es ilegal porque RMD está a menos de 2.000 metros del núcleo urbano y porque produce residuos ilegales como PVC, cinc y cobre, además de estar a cielo abierto. Los vecinos protestaban ayer contra la segunda fase en la que se realizará la termólisis, en la que incineran y reciclan neumáticos y cables y de la que salen filtraciones, con un radio de acción de 9 kilómetros de las dioxinas. El portavoz de la plataforma Valle de Conforcos, Ismael González, aseguró que esta planta de termólisis e incineración de neumáticos proyectada por la empresa RMD «será la tumba del municipio, ya que cambiará su estructura con residuos tóxicos que elevan el riesgo de padecer cáncer».