Posible salida de la Bolsa y fusión con Uminsa

A Victorino Alonso le queda ahora la parte en teoría más dura de una operación de gran calado para una posible fusión de todas sus empresas mineras en una sola, que a día de hoy controlaría una cuarta parte de la producción y la plantilla carbonera de España y dos terceras partes de la leonesa. La opa, autorizada por la CNMV y efectiva desde el día 18 pasado, ha logrado aparentemente casi la mitad de sus objetivos. Pero la realidad es que puede quedar lo más complicado: que unos 3.000 accionistas se molesten en acudir a ella para cobrar cantidades que pueden resultar ridículas por sus títulos. Ejemplo: hay quien, como la basílica de La Encina de Ponferrada, tiene una acción, por la que recibiría nueve céntimos. Los propietarios del 18,46% restante no son grandes inversores en bolsa, sino colectivos o particulares que en algunso casos se sospecha que desconocen que las poseen. Un gigante Si Alonso logra hacerse con el 100% de la Minero, la sacará de la Bolsa. Primero porque ya no tiene sentido que cotice en la coyuntura actual del sector minero y segundo porque, aunque no se reconoce oficialmente, la intención es fusionar MSP con Uminsa, la compañía en la que ha ido aglutinando todas las otras minas que ha adquirido desde 1988 en todas las cuencas leonesas y palentinas; más recientemente ha comenzado a entrar en Asturias, donde ya tuvo presencia antes y cuya aventura acabó entonces con el cierre de las explotaciones. La compañía resultante sería un gigante minero e industrial en España, con 3.500 mineros y una producción anual de unos millones de toneladas de carbón para generación eléctrica.