Caja España implanta un sistema para cobrar con tarjetas a través de un PDA

Caja España presentó ayer un novedoso sistema de cobro con tarjetas de crédito que sustituye al datáfono portátil por un miniordenador de los conocidos como PDA con un periférico para la lectura de bandas magnéticas y una microimpresora incorporada. La principal ventaja de este cambio es la movilidad total del punto de venta a través de un moden GPRS, lo que posibilitará cobrar con tarjetas de crédito productos y servicios a domicilio, como el gasóleo de calefacción o la comida rápida. Aunque ya existen en la actualidad datáfonos portátiles, el PDA mejora la cobertura, es más ligero y tiene la ventaja de que es un ordenador, lo que permite integrar en el mismo aparato otras herramientas de gestión de la empresa, como la gestión de almacén o la emisión de facturas, por ejemplo. El sistema fue desarrollado a petición de Caja España por la empresa de desarrollo de software Proconsi, y el programa se instala en un PDA modelo iPAQ de HP que ha sido homologado como terminal de punto de venta por Servired, con lo que será apto para pagar con cualquier tarjeta de crédito. Un restaurante de León, un distribuidor de gasóleo de calefacción, un mayorista de suministros para hostelería y una franquicia de cervezas de la capital ya utilizan satisfactoriamente este sistema que ayer fue presentado por el director general adjunto de Caja España, Javier Ajenjo, el director de activo inmovilizado de la entidad, José Martínez Escanciano, y los directores de Proconsi y de HP, Tomás Castro y Carlos Prieto. Ajenjo destacó los beneficios que este sistema reportará a aquellos sectores que precisen movilidad, como la comida a domicilio o los servicios de asistencia técnica, que podrán cobrar de forma efectiva sin necesidad de manejar dinero. Conexión dentro de un local Otro sector en el que Caja España prevé que el sistema tendrá buena acogida es el de los restaruantes, ya que aunque pueden utilizar datáfonos convencionales, el PDA permite cobrar en presencia del cliente, que no tiene que perder de vista su tarjeta de crédito con el riesgo que conlleva. Además, el PDA admite, con la conexión a través de una tarjeta Wifi, enviar datos dentro de un local a puntos alejados hasta 300 metros, una utilidad que, unida a la integración de otros programas informáticos de gestión, puede permitir, por ejemplo, que el camarero anote la comanda en el miniordenador que, automáticamente la envía a una impresora en la cocina, además de elaborar la factura, realizar el cobro con una tarjeta de crédito e incluso integrar ese ingreso en la contabilidad. El director de inmovilizado de Caja España, José Martínez Escanciano, prevé que aproximadamente el 40% de los más de 3.000 comercios que trabajan con telepuntos de venta de Caja España adoptarán este nuevo sistema.