La oposición duda de que se introduzcan de forma inmediata mejoras en los cruces peligrosos

La reivindicación de una autovía entre León o Valladolid, o en su defecto, del desdoblamiento de la N-601 en el tramo que corresponde a ambas capitales de provincia, se confunde con las peticiones reiteradas de ayuntamientos y usuarios que exigen mejoras inmediatas en los cruces que surcan la carretera al sur de la capital leonesa. La densidad de tráfico a partir de la intersección del cruce con la N-625, de Mansilla a León, arropa estas peticiones de residentes en pueblos de la ribera del Esla, el Porma, Villaturiel o Valdefresno. La oposición muestra su escepticismo sobre la posibilidad de que se acometan mejoras en las intersecciones afectadas por estructuras defectuosas o escasas de acuerdo a la capacidad de la carretera. Manuel Fernández Zanca interpeló en el Senado en el 2002 a cerca de puntos siniestros de la vía. También el secretario provincial del PSOE , Miguel Martínez, criticó en ese año la pérdida de una partida de 30.000 euros asignada en los presupuestos del 2001 para la acometer mejoras en la vía y que, según denunció, nunca llegaron a su destino final.