La Guardia Civil pone fin al bloqueo de la Coag a la azucarera de La Bañeza

Agentes del Servicio de Intervención Rápida (SIR) de la Comandancia de la Guardia Civil de León despejaron la puerta de entrada a la descarga de remolacha de la azucarera de La Bañeza sobre las ocho y media de la noche de ayer, después de que miembros de la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (Coag) paralizaran la entrega de turbérculo durante toda la jornada. La intervención de los agentes se saldó sin detenidos y, tras algunos forcejeos y reproches por parte de los manifestantes, las puertas de la fábrica se abrieron a los camiones y tractores que, cargados de remolacha, llevaban toda la jornada esperando. Sin embargo, al cierre de esta edición, ningún transporte había entrado hasta el punto de recepción de remolacha. Todo empezó cuando, a las siete de la mañana, un grupo de cultivadores de remolacha impidió la apertura de las puertas que deben atravesar los vehículos para la entrega de la remolacha. Uno de los manifestantes de la Coag se ató con una cadena a ambas hojas de las puertas. Agentes de la Guardia Civil de la Compañía de Astorga, al mando de un oficial, se personaron en el lugar del suceso e intentaron convencer a los agricultores para que depusieran su actitud sin lograrlo. La Coag protestaba por lo que considera descuentos -tierra e impurezas que lleva la remolacha- desorbitados, entorno a un 13% esta semana y cerca del 14% en diciembre, así como por la alteración del cupo de entrega con el reinicio de la campaña remolachera el martes pasado. Comunicado de condena Ayer por la mañana la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), la Unión de Agricultores y Ganaderos de León (Ugal-UPA, la Confederación Nacional de Cultivadores de Remolacha (CNCRYCA) y Azucarera Ebro enviaron un comunicado de condena por los hechos, que calificaba como chantaje y coacción, ya que la mesa de fábrica acordó por mayoría el reparto del cupo para estos días.