Una nevada colapsa medio país

Poblaciones aisladas. Autovías y carreteras cortadas. Líneas férreas intransitables. Miles de turismos atrapados por la misma nieve que impidió el tráfico de camiones en la zona norte. El temporal de nieve que sacudió ayer con fuerza la mitad a norte de la península y que no remitirá hasta mañana, según las previsiones, sembró el caos en las comunicaciones por carretera y ferrocarril y dificultó el tráfico en los aeropuertos y el marítimo. En la misma jornada, se batía el récord de consumo de gas para calefacción. Miles personas quedaron aisladas en cientos de localidades del norte y también centenares de conductores tuvieron que pasar la noche en sus vehículo o buscar refugio al quedar atrapados en las autopistas de la provincia de Burgos, entre la capital y Miranda de Ebro. La alerta meteorológica y la recomendación de la DGT de no viajar por carretera se mantenía ayer en nueve comunidades, en las que más de quinientas localidades y sus 17.000 habitantes -según la estimación de Protección Civil- quedaron aisladas por la nieve o con graves dificultades de acceso. Atasco y tensión La situación más tensa se vivió al noroeste de Burgos, en la autopista de peaje AP-1 y en la autovía A-1. Entre dos y tres mil personas quedaron retenidas en sus vehículos por la nevada en la vía de pago entre Burgos y Miranda durante la madrugada de ayer. Sus conductores y pasajeros -hasta 1.700, según el departamento vasco de interior- se refugiaron durante la noche en polideportivos de Miranda, Pancorbo, Briviesca y Burgos. La situación tendía a normalizarse a primera hora de tarde del sábado, aunque todavía había varios cientos de vehículos detenidos. Finalmente se decidió, tras varias horas de corte, abrir al tráfico la autovía A-1 que une Álava con Burgos y que discurre en paralelo a la autopista de peaje. Había sido cortada a primera hora de la mañana, como la N-1, para evitar nuevos colapsos, pero ambas vías se pudieron abrir al tráfico gracias a la mejora del tiempo y al trabajo de 150 operarios. Los conductores atrapados criticaron a la concesionaria de la autopista, que no dejó de cobrar sus tasas de peaje y permitir el acceso a sabiendas de que había zonas del trazado atascadas. Camiones y trenes También centenares de camioneros quedaron atrapados en el lado francés del frontera de Irún, en Viriatou, ante la decisión de Gobierno vasco de impedir el tráfico a los vehículos pesados por su comunidad. El tráfico ferroviario se vio interrumpido en varias líneas del norte y se suspendieron los enlaces Palencia-Santander y Miranda-Bilbao-Irún-Pamplona-Logroño, según confirmó Renfe. Había además interrupciones en varias líneas de cercanías del País Vasco y Castilla y León. Rescate marítimo En la mar, la flota estuvo amarrada en todos los puertos cantábricos y se cerró al tráfico marítimo el puerto menorquín de Ciudadela. En Ibiza, Salvamento Marítimo rescató sanos y salvos a los 22 tripulantes del carguero Rolón Sur , procedente de Denia, que quedó embarrancado en la isla de los Ahorcados en su maniobra de aproximación a puerto.