La estación podrá disponer de todas su áreas con espesores de nieve entre uno y tres metros
San Isidro reabre hoy con siete pistas y prepara para el viernes sus 24 kilómetros
La apertura de los remontes será progresiva por las labores intensas de acondicionamiento El alcalde de
Prácticamente cuatro días sin parar de nevar han logrado dar un vuelco espectacular a la situación de San Isidro, que durante toda la temporada había ido salvando la campaña con espesores críticos y una superficie esquiable con una media de no más de 6,5 kilómetros de pistas, con la consiguiente merma de esquiadores respecto al pasado año propiciada por esta circunstancia. Tras cuatro días cerrada, la estación invernal abre hoy de nuevo. De momento sólo el área de Salencias, en marcha por vez primera desde que empezó la temporada, con cinco kilómetros esquiables, siete pistas y unos espesores entre los 50 y 90 centímetros. Desde hoy y hasta el viernes podrán ponerse en servicio de forma progresiva la totalidad de las pistas de San Isidro a medida que avanzan las tareas de acondicionamiento, según confirmaron ayer fuentes del enclave invernal. Precisamente, en esta zona más alta los espesores llegan a superar los tres metros, con un mínimo de uno. El 70% de los recursos humanos y técnicos de San Isidro se centraron ayer en las labores de acondicionamiento de Salencias en tareas como balizamiento, preparación de pistas, medidas de seguridad y comprobar el funcionamiento de los remontes. Mientras, el otro 30% trabajó en Cebolledo limpiando las zonas de acceso para que este área pueda ponerse en marcha mañana. Las intensas nevadas, incluso, han enterrado en un manto blanco la mitad de los pilotes del telesquí de esta zona. Desde la dirección de la estación se pide a los esquiadores que sean pacientes, ya que las pistas, tras un temporal de semejantes características, no pueden ponerse a disposición de los usuarios en un plazo de 24 o 48 horas. En este sentido, señala el «esfuerzo realizado» y la estrategia planeada para que el viernes ya estén abiertos los 23,8 kilómetros totales de la estación, el 100% de las pistas, hecho hasta ahora inédito en la temporada presente. Probablemente hoy ya no sea necesario el uso de cadenas para acceder a San Isidro, con lo que la llegada de los esquiadores quedará despejada. El personal más antiguo de la estación asegura no recordar una nevada tan intensa y prolongada desde hace años.