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El PP presentó 15 enmiendas que fueron rechazadas en base a una ilegalidad jurídica

El Pleno aprobó el presupuesto de 170 millones de PSOE y UPL

Covadonga Soto desvela que es arriesgado el uso del edificio Abella para actividades lúdicas

Gema Cabezas y Javier Chamorro examinan unos documentos durante el Pleno de ayer

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Luis Urdiales - león
León

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El equipo de gobierno municipal de León sacó adelante el único trámite pendiente que le faltaba a la aprobación del primer presupuesto de su mandato, que contempla 170 millones de euros. El desarrollo de este punto centró la mayor parte del debate político que ofreció el Pleno del Ayuntamiento de León, a cuenta de las enmiendas que presentó el PP, desestimadas finalmente por UPL y PSOE, por no ajustarse a la norma jurídica correspondiente que regula este tipo de reclamaciones. Francisco Saurina se refirió, mientras defendía la posturas del Partido Popular ante las partidas de inversión que propugna para la ciudad, a la necesidad de impulsar un aparcamiento de camiones en terrenos de titularidad municipal. En el mismo elenco, incluyó el portavoz de la oposición la petición de incluir en los presupuestos una partida que posibilitara la recuperación de actividades en el antiguo cine Abella. La réplica a la primera de estas cuestiones elevó el tono del debate, después de que los portavoces del PSOE y UPL, Ibán García del Blanco y Javier Chamorro, advirtieran a los populares sobre un punto de incongruencia en su propuesta de aparcamiento y la que defiende el gobierno autonómico, que ya ha respaldado con presupuesto la construcción de un centro de transportes en Eras de Renueva. Covadonga Soto, concejala de Asuntos Sociales, zanjó el debate que encendió la sexta enmienda del PP, sobre el uso del edificio Abella, con la aportación de dos informes redactados por el director técnico del servicio contra incendios, Carlos Rascón, y el arquitecto municipal Miguel Chaguaceda, en los que se advierte de que el local no reúne las condiciones de seguridad exigidas para realizar en él actividades lúdicas. Ante la insistencia de los concejales populares, Covadonga Soto matizó que no era su intención «poner en riesgo la seguridad de las personas mayores» a la vez que pidió que no se utilizara «demagogia y manipulación con este sector al que se le trata de implicar en una polémica por las actividades que se realizaron en el Abella». La oportunidad y la urgencia de invertir en el centro de la ciudad o en los barrios acaparó otra parte del debate entre gobierno municipal y la oposición.

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