El fiscal pide 1,5 años de cárcel por romper la puerta del piso familiar

El ministerio fiscal solicitará un año y medio de prisión para un hombre, que será juzgado ante un tribunal popular en León, por romper supuestamente a patadas la puerta de la vivienda de su ex compañera sentimental e introducirse en ella, lugar en el que fue detenido por la policía. La vista se celebrará en la Audiencia Provincial de León el próximo día 30 de marzo, cuando esta persona se enfrentará a la solicitud de una pena de un año y medio de prisión por el supuesto delito de allanamiento de morada así como tres fines de semana de arresto por una falta de daños, según consta en el escrito del fiscal, recogido ayer por la Agencia Efe. Lo que ocurrió Los hechos se remontan al 25 de mayo de 2003, sobre las 7,30 horas de la mañana, cuando el acusado, F.N.C.E., de nacionalidad colombiana, tras haber coincidido durante esa noche en un pub con una mujer con la que había mantenido una relación sentimental hasta un mes antes aproximadamente, le acompañó hasta el portal donde residía ésta. Momentos después el acusado comenzó a llamar repetidamente al timbre del portero automático, sin que su ex pareja le abriera la puerta, aunque poco después pudo entrar en el inmueble al salir otra persona del mismo. Tras llamar al timbre de la vivienda, comenzó a dar patadas a la puerta hasta que rompió un trozo de la misma, tras lo que introdujo la mano por el hueco y abrió la cerradura. Logró entrar Una vez dentro el acusado se dirigió hacia el dormitorio de la víctima, la cual al percatarse de la presencia del acusado cerró desde dentro la puerta con cerrojo y avisó por teléfono a las fuerzas de seguridad del Estado, mientras el acusado intentaba abrir, al tiempo que decía que solo quería hablar con ella. Poco después llegó al lugar la policía, que accedió al piso y detuvo al acusado en el interior de la vivienda. Los daños de la puerta fueron tasados en 69,60 euros, cantidad que el acusado abonó al propietario de la vivienda, según las mismas fuentes. Por su parte, la defensa del acusado niega el delito de allanamiento de morada, si bien admite la falta de daños, al tiempo que pide la libre absolución.