Permitirá liberar otras paralizadas durante un año
El consejero de Economía y Empleo de la Junta, Tomás Villanueva, en cuyo departamento se incluye ahora el de Energía y Minas, mostró ayer su satisfacción porque Bruselas ha dado la razón a la Aministración autonómica en casi todos sus argumentos. Aunque señala que en el único que no respalda pero obvia finalmente, el de la falta de notificación, se insiste en que sí la hubo y que se dio por válido un silencio administrativo que la CE no considera. Además de reconocer trabajo realizado por el anterior Gobierno -durante el cual se produjo el expediente y al cual se respondió desde los servicios jurídicos con el apoyo de la patronal y los sindicatos mineros-, Villanueva apuntó que desde que se hizo cargo en junio «ha habido reuniones y contactos para agilizar y desbloquear las ayudas a las empresas mineras», paralizadas durante el 2003. De hecho se iban a conceder bajo los mismos criterios que en los dos años precedentes, que se habían puesto en cuestión. El consejero de Economía añade que este cierre del expediente y aprobación «coincidirá con que la nueva Ley de Actuación Minera», la que abarcará del 2004 a 2007, «está avanzando en los trámites administrativos para someterla a las Cortes», con un «volumen importante» de nuevas ayudas al sector que no supo precisar al encontrarse de viaje. Lo importante, apunta Villanueva es que se demuestra que no hubo duplicidad ni superposición con las ayudas del Estado y sí buena voluntad de la Junta para colaborar y mejorar el sector carbonero cumpliendo las normativas europeas nacionales y regionales. «Ha habido reuniones complicadas, para lograr de la comisión la necesaria sensibilidad de que había que agilizar el expediente por la importancia y el peso del sector en la industria y el empleo de la comunidad y para eliminar la incertidumbre del futuro», concluyó.